Buscar Iniciar sesión

Cóndor y Luri, dos turistas en el Siglo de Oro

La Compañía Nacional de Teatro Clásico presenta una nueva colección de libros que pone el foco en el arte áureo
Descripción de la imagenSERGIO PARRACNTC

Creada:

Última actualización:

No todo son escenarios y funciones de martes a domingo en la Compañía Nacional. Y, por ello, la institución liderada por Lluìs Homar ha decidido dar un pasó más allá y «ampliar la mirada», dice el director, sobre el Siglo de Oro con «los distintos saberes y ofrecer diferentes puntos de vista para poner en valor algo extraordinario». Así, el proyecto presentado sobre las mismas tablas de la Comedia consiste en una nueva colección de libros que señalen directamente al arte áureo a través de filósofos, antropólogos, sociólogos, expertos en la época... Para comenzar, los dos primeros títulos: «La grandeza. Teatro, poesía y política en la España del Siglo de Oro», de María Cóndor, y «El recogimiento. La aventura del yo», de Gregorio Luri. Son los inicios de este «viaje que suma», en palabras de Homar.
Dos libros que se podrán adquirir a la salida de las funciones por apenas tres euros y que versan sobre una misma etapa, pero que, sin embargo, la abordan desde miradas contrapuestas. «No tienen nada que ver», reconoce una Cóndor que bien merece un libro para solo explicar su trayectoria: doctora en Historia del Arte y licenciada en Filología y en Derecho, pero también pianista, piloto, nadadora, bailarina, eterna estudiante, traductora... y, ahora, «turista» del Siglo de Oro en un viaje «del que todavía no he vuelto porque he aprovechado ese reprís para empezar otros proyectos», comenta.
A la «tourné» también se ha apuntado el filósofo y pedagogo Luri, que del mismo modo reconoce que lleva «un año haciendo turismo» por los siglos XVI y XVII: «En este año tan complejo que veías caras de sufrimiento yo estaba disfrutando todas esas cosas que había postergado durante años, como leer a Góngora, las rimas sacras de Lope, la obra política de Quevedo... Y es una gozada», explica quien se ha propuesto «no transmitir erudición, sino el entusiasmo de pasar horas junto a los grandes». Además, añade Luri que su pretensión no es siquiera que el lector se aferre a «El recogimiento», prefiere que «abandone el libro cuanto antes y se ponga con los clásicos, que nunca defraudan».