La Conselleria de Cultura ha autorizado las obras en la fachada del edificio del Ayuntamiento, declarado Bien de Interés Cultural, BIC, después de que el pasado 24 octubre se desprendiera parte de una cornisa de la torre del reloj o campanario. Con este visto bueno, el equipo de gobierno tiene previsto aprobar el próximo martes en Junta de Gobierno Local el proyecto de Medidas Cautelares de Emergencia para el Palacio Consistorial.

Para llevar a cabo estas obras, la secretaria autonómica de Cultura, Pilar Tébar, y la directora general de Patrimonio Cultural, Marta Alonso, se han reunido hoy con las concejalas de Urbanismo, Rocío Gómez, y de Cultura, Nayma Beldjilali; en concreto, han abordado las actuaciones que se están llevando a cabo en la Torre del Reloj, siendo una de las primeras la colocación de las mallas de protección, el vallado del perímetro y el corte de tráfico por la calle Jorge Juan.

Los siguientes pasos, como medidas de emergencia, son desmontaje y acopio de la balaustrada de coronación de las torres y la colocación de las protecciones preventivas necesarias para evitar la caída de elementos desprendidos a vía pública. Se trata de protecciones que no tienen carácter permanente sino provisional hasta una intervención de reparación más exhaustiva. Todos los anclajes se ejecutarán en juntas entre sillares para minimizar roturas.

Desde ambas administraciones resaltan la “total colaboración en la ejecución de las acciones y destacan el trabajo de los técnicos tanto municipales como de la Conselleria”.

Además, el Ayuntamiento está ultimando la redacción del proyecto de urgencia para la rehabilitación y consolidación de toda la fachada, que posteriormente será autorizado por la Conselleria de Cultura.

Por otro lado, está en fase de realización el estudio arquitectónico pormenorizado de patologías de la fachada del Ayuntamiento, en el que se establecerán las prioridades de intervención. Una vez redactado, se ejecutará en todas aquellas que se hayan clasificado como urgentes.