El servicio de Movilidad Sostenible del Ayuntamiento de València ha iniciado los trabajos de señalización de la limitación de velocidad máxima de circulación a 30 kilómetros por hora en toda la ronda interior de la ciudad. Son 88 marcas viales pintadas sobre la calzada de las calles Xàtiva, Guillem de Castro, Blanqueries, Conde de Trénor, Pintor López, plaza del Temple, plaza de Tetuán, Justicia, General Palanca, General Tovar y Colón.

Estas calles que constituyen la ronda interior se unen a un 64 por ciento de las calles de Valencia que ya tienen la velocidad reducida a 30 kilómetros por hora. Conviene recordar que ésta es la velocidad máxima en las calles de un solo carril y en aquellas de dos carriles en los que cada uno sea en una dirección.

La actuación, en línea con las políticas de movilidad urbana recogidas en el vigente Plan de Gobierno del Ayuntamiento de València, y en consonancia con lo establecido también en el Plan Especial de Protección de Ciutat Vella, completa a su vez la serie de actuaciones realizadas desde la Concejalía para reducir aún más el tráfico y su impacto en el entorno de la ‘Finca de Hierro’, atendiendo a un informe del Síndic de Greuges.

El concejal de Movilidad Sostenible, Giuseppe Grezzi, ha explicado que “desde el principio, el objetivo de la Concejalía de Movilidad Sostenible ha sido caminar hacia una ciudad en la que el protagonismo en el espacio público fuera de las personas, y no de los vehículos”. “Y aunque en un principio parecía que hacíamos este camino acompañados solamente de la ciudadanía –ha añadido- es interesante ver cómo otras instituciones se van sumando a este espíritu y nos empujan a ir incluso más lejos, lo que hacemos con agrado”, ha concluido.

Cabe recordar que las sucesivas actuaciones de la Concejalía de Movilidad Sostenible en este entorno ya han producido un notable descenso de la intensidad del tráfico de vehículos en las calles del perímetro del entorno de la plaza de San Agustín y la Estación de Xàtiva. Como ejemplo, el concejal ha señalado que mientras en enero de 2016 circulaba una media de 42.964 vehículos motorizados al día por la calle Xàtiva, en enero de 2020 (antes de la pandemia) eran 31.610, y en 2021, 18.077, en la actualidad ya se registran regularmente más de 8.000 pasos de bicicletas y vehículos de movilidad personal. Lo mismo sucede en San Agustín-San Vicente, que ha caído de 14.664 a 6.191 vehículos a motor; y en Marqués de Sotelo, donde se ha pasado de 16.086 a 4.221. En la calle Sant Pau, las mediciones puntuales realizadas muestran un descenso de 5.061 vehículos motorizados en noviembre de 2019 a los 2.441 de marzo de 2021.

Esta reducción del límite de velocidad se suma, junto a la renovación de la flota de autobuses que circulan por la zona, a las actuaciones realizadas para reducir, además del tráfico, las molestias de ruido que genera el paso de vehículos (tal como ha destacado el concejal, el ruido de la rodadura de los vehículos es mayor cuanto más alta es la velocidad de circulación).