Astronomía

La sonda solar Parker ha hecho historia: es la nave que más se ha acercado al Sol

No solo se han convertido en la nave espacial más rápida jamás construida, también se ha acercado 7 veces más a nuestra estrella que cualquier otra en el pasado.

Sol
La sonda solar Parker atravesando columnas de plasmaNASA/Johns Hopkins APL/Ben SmithNASA/Johns Hopkins APL/Ben Smith

Hasta hace poco más de una década, el objeto más rápido construido por el ser humano era la sonda Juno, capaz de alcanzar los 265.000 km/h. Así fue hasta 2018 cuando se lanzó la sonda solar Parker y rompió todos los récords al sobrepasar los 690.000 km/h en su camino al Sol.

Su objetivo, convertirse en la nave que más se haya acercado jamás a nuestra estrella, lo ha conseguido estos días. Y de sobra. De acuerdo con la NASA, envió una señal de radio a la Tierra alrededor de la medianoche del jueves (26 de diciembre), una señal clave de que la sonda está funcionando normalmente.

La sonda Parker se acercó más de siete veces al Sol que las naves espaciales anteriores. Esto fue posible gracias a un escudo térmico que puede soportar temperaturas de hasta 1.371 °C.

Todo comenzó el martes 24 de diciembre cuando la nave espacial del tamaño de un automóvil se acercó a 6,1 millones de kilómetros de la superficie del Sol, casi 10 veces más cerca que la órbita de Mercurio alrededor de la estrella. En ese momento viajaba a una velocidad que le hubiera permitido recorrer la distancia entre Tokio y Madrid en unos 20 segundos.

El control de la misión no pudo comunicarse con la sonda durante la parte más cercana de su encuentro con el Sol, por lo que los científicos del Laboratorio de Física Aplicada (APL) de Johns Hopkins en Laurel, Maryland, esperaban ansiosamente la señal de la baliza para confirmar la supervivencia de la nave espacial.

Luego de eso hemos vuelto al silencio: los datos de telemetría detallados no volverán a estar disponibles hasta el 1 de enero de 2025, pero las imágenes recopiladas durante el sobrevuelo se enviarán a casa a principios de enero, seguidas de datos científicos más adelante en el mes, cuando la sonda se aleje más de nuestra estrella.

Ningún objeto creado por el ser humano ha pasado nunca tan cerca de una estrella, por lo que Parker realmente devolverá datos de territorio inexplorado” señala Nick Pinkine, director de operaciones de la misión, en un comunicado.

Parker se lanzó en 2018 para ayudar a descifrar algunos de los mayores misterios sobre nuestra estrella, como por qué su capa más externa, la corona, se calienta a medida que se aleja de la superficie del Sol, y qué procesos aceleran las partículas cargadas a velocidades cercanas a la de la luz. Además de revolucionar nuestra comprensión del Sol, la sonda también captó primeros planos poco comunes de cometas que pasaban por allí y estudió la superficie de Venus.

En Nochebuena, la sonda voló a través de columnas de plasma que todavía estaban adheridas al Sol, donde observó erupciones solares que se producían simultáneamente debido a la turbulencia incrementada en su superficie.