Descubrimiento
Cada vez más cerca de la vida en Marte: científicos hallan una nueva pista gracias a un meteorito marciano encontrado en la Tierra en 2011
Un estudio indica que el agua estuvo presente en el planeta rojo casi al mismo tiempo que surgió en la Tierra
Un descubrimiento reciente podría cambiar nuestra comprensión de Marte y su capacidad de albergar vida en el pasado remoto. Científicos han identificado rastros de agua en el planeta rojo, datados de hace 4.450 millones de años, mediante el análisis de un grano de circón encontrado en el meteorito marciano 'Black Beauty'. Este hallazgo podría ser la evidencia más antigua de agua caliente en Marte y sugiere que las condiciones en el planeta podrían haber sido propicias para la vida, similares a los ambientes hidrotermales que encontramos en la Tierra.
El meteorito 'Black Beauty' fue hallado en el desierto del Sahara en 2011. Esta roca espacial, expulsada de Marte tras un impacto celeste hace entre 5 y 10 millones de años, contiene fragmentos de la historia marciana que abarcan miles de millones de años. En un estudio publicado en Science Advances, los investigadores se enfocaron en un grano de circón dentro del meteorito, cuyo análisis reveló evidencias de interacciones con agua líquida hace más de 4.400 millones de años.
Según Jack Gillespie, autor principal del estudio, este descubrimiento indica que el agua estuvo presente en Marte casi al mismo tiempo que surgió en la Tierra, lo que amplía la posibilidad de que el planeta rojo haya sido habitable en su etapa primigenia.
¿Cuál es el papel del circón en la investigación?
El circón, un mineral resistente que actúa como una cápsula del tiempo, permitió a los científicos determinar la antigüedad y las condiciones de su formación. Gracias a la descomposición natural del uranio en plomo dentro del mineral, los investigadores calcularon que el agua interactuó con el circón cuando este se formó en la corteza marciana. Además, detectaron rastros de hierro, sodio y aluminio en la estructura cristalina del circón, elementos indicativos de procesos hidrotermales.
Estos hallazgos son comparables a los patrones observados en ambientes hidrotermales terrestres, como fuentes termales y respiraderos hidrotermales, que se consideran hábitats clave para la vida microbiana en nuestro planeta.
Los fragmentos de roca en 'Black Beauty' revelan una corteza marciana que sufrió múltiples impactos, lo que alteró significativamente su superficie. Sin embargo, el descubrimiento de circones antiguos indica que la corteza primitiva de Marte podría haber tenido ambientes estables y cálidos, ideales para la existencia de agua líquida. Según el Dr. Aaron Cavosie, coautor del estudio, estos entornos hidrotermales pudieron persistir durante largos periodos, proporcionando condiciones habitables. Sin embargo, aún se desconoce si estos sistemas eran episodios aislados o una característica constante en el Marte primitivo.
La investigación sugiere que los sistemas hidrotermales marcianos podrían haber albergado vida en sus primeras etapas. Aunque este estudio se basa en un meteorito, la comunidad científica espera que futuras misiones espaciales traigan muestras directamente de Marte para profundizar en estos análisis.
El rover Perseverance de la NASA, actualmente explorando el cráter Jezero, está recolectando muestras de rocas que podrían preservar evidencia de vida microbiana. Briony Horgan, coinvestigadora de la misión, subraya la importancia de estudiar estas muestras en la Tierra para obtener un contexto geológico más detallado.