El estreno de Rubén Viñuales al frente de la lista electoral del PSC en Tarragona no ha podido ir mejor. El candidato socialista, además de ganar las elecciones, consigue dos concejales más con respecto a los anteriores comicios de 2019. El PSC tendrá nueve de los 27 concejales mientras que ERC, con Pau Ricomà –alcalde de la ciudad en los últimos cuatro años– ha perdido uno de sus concejales.

El Partido Popular, con Mercè Martorell, pasa a ser la tercera fuerza política en la ciudad, mejorando de manera notable los resultados que obtuvo su formación en su anterior paso por las urnas. De esta manera Martorell ha conseguido cuatro concejales.

Los resultados electorales también constatan que VOX se estrenará en Tarragona con los tres concejales conseguidos por Francisco Javier Gómez. La quinta fuerza será Junts per Catalunya con solo tres representantes.

Por primera vez este partido entrará en este consistorio. Igualmente desaparecen del Ayuntamiento dos partidos: Ciudadanos y la CUP que no han logrado ningún concejal.

La participación ha sido baja, un 52 por ciento, lo que se traduc en 10,8 puntos por debajo de lo ocurrido en las elecciones anteriores.

En todo caso, lo que parece evidente es que Tarragona volverá a ser socialista, uno de los feudos que tradicionalmente ha estado en manos del PSC, como sucedió con Josep Maria Recasens y Josep Fèlix Ballesteros, y con la excepción del tiempo del convergente Joan Miquel Nadal como edil. En 2019, los socialistas fueron la fuerza más votada, aunque no lograron finalmente la alcaldía a consecuencia del pacto de gobierno municipal logrado por ERC, Junts, comunes y CUP y que hizo alcalde a Pau Ricomà.