Sin pelos en la lengua

Marta Ferrusola: una vida en frases

La ex primera dama mantuvo opiniones que en ocasiones fueron controvertidas

Marta Ferrusola pasará a la historia como uno de los personajes más influyentes en la Cataluña del último medio siglo. Fue mucho más que la esposa de Jordi Pujol, primera dama catalana en el tiempo en el que estuvieron al frente de la Generalitat. Ferrusola fue un personaje con poder, venerado y aplaudido, pero también objeto de numerosas controversias. Algunas de las frases que ha dejado sirven para conocer mejor a Ferrusola.

En su comparecencia en la comisión de investigación del Parlament sobre fraude, evasión fiscal y corrupción, el 23 de febrero de 2015, es donde probablemente dio sus mejores frases. En aquella ocasión aseguró, al ser preguntada por los negocios de su familia, que no recordaba gran cosa porque “mi memoria es muy pequeña”. También demostró ser una mujer de carácter al dejar para la posteridad frases al asegurar sobre su familia que “no tenemos ni cinco". Sobre los viajes de los Pujol a Andorra dijo que "sólo he ido a Andorra a esquiar". Ferrusola siempre estuvo convencida que los suyos contaban con apoyo popular porque "hay más gente que nos quiere que la que nos juzga". Tampoco ocultó que se encontraba cómoda acudiendo a la comisión parlamentaria porque “me da mucha pena este diálogo. Cataluña no se merece esto”.

Respecto a la presencia de emigrantes en Cataluña, Marta Ferrusola llegó a declarar que “mis hijos no podían jugar en el parque cuando eran pequeños. Me decían, madre, todos son castellanos”. Esas palabras, pronunciadas durante una conferencia en Girona en 2001 causaron un gran revuelo. En el mismo acto también comentó que “ si los catalanes no nos preocupamos de Cataluña, los otros nos la destruirán. Todas las baterías apuntan en contra de Cataluña. Estamos retrocediendo no cinco, sino 19 o 20 años'. Pese a no concretar a quién se refería puntualizó seguidamente que “van en contra de nuestro país, en contra de lo mucho que hemos remontado”.

A Marta Ferrusola no le gustó que Pasqual Maragall llegara a la presidencia de la Generalitat en sustitución de su marido. En 2004, sin pelos en la lengua, declaró en un acto público que “aunque ganamos las elecciones, nos robaron el Govern. Es como si entran en tu casa y te encuentras los armarios revueltos, porque te han robado”.