La conselleria de Educación ha anunciado que el próximo curso escolar empezará el lunes 9 de septiembre para la educación infantil, primaria y secundaria, y el día 12 para los estudios postobligatorios (como el bachillerato y la formación profesional).

Se trata de la fecha que había propuesto el Consejo Escolar de Cataluña y era la que tenía más números y menos oposición de la comunidad educativa. Esta idea, que tiene su origen en 2008, pedía cinco días laborables para poder preparar el curso.

La fecha del inicio del curso ha sido objeto de controversia durante estos últimos dos años entre el departamento, los sindicatos y la comunidad educativa, generando diversas huelgas y protestas. El desencadenante fue la determinación del anterior conseller, Josep González i Cambray, de establecer que el curso comenzaría siempre el cuarto día hábil del mes.

La nueva fecha busca que los docentes dispongan de más días para preparar el curso y sigue la intención de Educación de iniciar las clases antes de la Diada. Comenzar el curso el 9 de septiembre implica hacerlo tres días más tarde que el calendario actual del curso 2023-2024, que inició el 6 de septiembre.

Ante este anuncio, los sindicatos educativos han reprochado a la consellera tomar la decisión sin haberla pactado con ellos en la mesa sectorial de educación. La portavoz de Ustec·Stes, Iolanda Segura, ha expresado su desacuerdo con la fecha escogida, ya que opina que debería ser el 12 de septiembre, y ha lamentado que Simó les haya comunicado la decisión en la reunión de la mesa de este jueves, cuando no estaba previsto, y sin haberlo pactado en la mesa sectorial: "No es una forma ética ni correcta".

Las Associacions Federades de Famílies d'Alumnes de Catalunya (Affac) ven un desacierto volver a mover la fecha de inicio de curso, se han opuesto al cambio en el calendario escolar, y han pedido que "se dejen de tomar decisiones azarosas que no obedecen a ninguna estrategia basada en criterios pedagógicos".