Música

Barcelona recupera un violín de un discípulo de Stradivari

El Museu de la Música adquiere una joya de Nicolas Duclos de mitad del siglo XVIII

CATALUNYA.-El Museu de la Música de Barcelona recupera un violín de Nicolas Duclos de mitad del siglo XVIII
Vlad Stanculeasa, concertino de la OBC, toca el violín recuperadoEuropa Press

Se ha convertido en una de las grandes joyas del patrimonio musical barcelonés, un instrumento que forma parte ahora parte de la ciudad tras haber sido adquirido antes de que acabara en una subasta. El Museu de la Música de Barcelona acaba de hacer pública la recuperación de un violín de Nicolas Duclos construido en la capital catalana a mitad del siglo XVIII. Se trata de una pieza construida por el lutier francés Nicolas Duclos, afincado en Barcelona de 1740 a 1775, quien era discípulo del lutier de Cremona Antonio Stradivari.

El museo ha logrado comprar este instrumento antes de que fuera subastado y vendido a manos privadas y después de una negociación que ha durado más de un año, con la ayuda del Institut de Cultura de Barcelona (Icub).

La vendedora, propietaria de un taller-tienda de violines en Reino Unido, contactó a los responsables del Museu de la Música para saber si estarían interesados en adquirirlo, al saber que el museo ya dispone de otros tres instrumentos del propio constructor dentro de su colección: una viola de amor, un violín y un violonchelo. "El gran valor del violín recuperado es que, más allá de haber sido construido en Barcelona, se puede hacer un uso musical, a diferencia de los tres que ya tenemos", explica la jefa de colecciones y documentación del Museu, Marisa Ruiz.

El director del Museu de la Música, Jordi Alomar, fue a buscar personalmente este violín a Reino Unido: "Se trata de un instrumento muy singular y de gran valor patrimonial y musical", ya que dispone de un certificado original de autenticidad firmado por John Dilworth, conocido lutier inglés.

Una vez en el Museu de la Música, el violín debe tratarse para poder incorporarlo a la colección: pasará un mes sin oxígeno para eliminar todos los microorganismos y, una vez finalizado el aislamiento, será necesario realizar el registro y catalogación, la recopilación del estado y la introducción en el catálogo.