El presidente de la Asociación de la Industria Alimentaria de Castilla y León (Vitartis), Santiago Miguel, ha animado a las empresas de más reducida dimensión a que exploren la posibilidad de formalizar alianzas y aumentar su tamaño, con el fin de innovar más, mejorar su competitividad y ampliar mercados.

Santiago Miguel, que ha presidido esta mañana la Junta Directiva de Vitartis en las instalaciones de Campofrío Frescos en Burgos, recordó que impulsar el redimensionamiento de las industrias alimentarias y su mayor integración en la cadena, para superar retos que sobrepasan la capacidad individual, es el primero de los siete ejes de la ‘Estrategia para el fortalecimiento de la industria alimentaria de Castilla y León’, elaborada por Vitartis, que cuenta con el respaldo del Gobierno regional entre otras entidades e instituciones de la Comunidad.

[[H2:Tierra de ‘micros’]]

“En Castilla y León, sólo el 4,3% de las empresas cuenta con diez empleados o más; es decir, más del 95% de nuestro tejido productivo está integrado por empresas sin empleados y micropymes”, dijo el presidente de Vitartis. Unos porcentajes, añadió, muy similares a los de la media nacional.

En la industria alimentaria, sin embargo, las empresas con diez o más empleados representan casi el 21% del total del sector, más de 15 puntos por encima de la media regional.

“Un dato que, en todo caso, justifica igualmente nuestra insistencia en recomendar a las empresas más pequeñas que formalicen alianzas estratégicas para afrontar mejor los retos de la innovación y la digitalización, entre otros, con el fin de que puedan competir en nuevos mercados”, dijo Santiago Miguel.

Menos empresas

Según los últimos datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), la industria alimentaria y bebidas de Castilla y León cuenta con 2.808 empresas, un 6% menos que hace una década (2015), ejercicio en el que se consolidó en España el inicio de la nueva fase de crecimiento económico, tras la gran crisis de 2008.

Al margen del impacto de la pandemia (2020), que fue menor en este sector (-0,5%), la mayor reducción del número de empresas se produjo en 2023, a raíz de la modificación de los criterios de ‘empresas activas’ por parte del Ine (-5,2%).

Dicho esto, lo más relevante de la evolución del número de empresas del sector, en opinión del presidente de Vitartis, es que en la última década sólo ha disminuido el segmento de las empresas sin empleados (-32%), frente al incremento de las pymes (10%) y de las micropymes (2,3%).

También, entre las grandes empresas, en 2024 hay una menos que en 2015, probablemente por decisión propia, como consecuencia de las dificultades derivadas de la consideración legal de ‘gran empresa’ en comparación con la normativa que afecta a las pymes.

En cuanto al perfil de las industrias alimentarias socias de Vitartis, que concentran más del 30% del empleo del sector, la inmensa mayoría (82%) son compañías con plantillas de más de 50 empleados.

Más empleo

Según Santiago Miguel, si se unen estos datos a la evolución del empleo en el sector en este mismo periodo, “habrá que concluir que la industria alimentaria de Castilla y León goza de muy buena salud”.

El número de personas ocupadas en el sector ha aumentado un 40% en diez años: desde los 35.500 de 2015 a los más de 50.000 en 2024.

En este sentido, el presidente de Vitartis aseguró que la ‘Estrategia’ elaborada por la Asociación “establece una hoja de ruta de fortalecimiento, sobre todo en el segmento de las empresas medianas, que confiamos en que permitiría generar en torno a 15.000 nuevos empleos hasta 2029”.