Política

Mañueco: “Nadie en Vox en Castilla y León ni quería ni creía en esta decisión”

El presidente de la Junta pide, en una entrevista en La Brújula de Onda Cero, "una política de mano tendida" a los que han sido sus socios, aunque teme "las instrucciones que les puedan dar desde Madrid"

El presidente de la Junta, Alfonso Fernández Mañueco, afirmó que “nadie en Vox en Castilla y León ni quería ni creía” en la “decisión” de romper el gobierno de coalición y se mostró convencido de que “la voluntad de todos los miembros” del partido de Santiago Abascal de la Comunidad es de “colaborar” con el Ejecutivo autonómico, pero agregó que “otra cosa son las instrucciones que les puedan dar desde Madrid". “Nos podríamos entender bien”, dijo en una entrevista en La Brújula con Rafa Latorre, en Onda Cero.

Mañueco destacó, tras la remodelación de su Gobierno, que quiere “mirar al futuro” ante una “situación que se ha producido por una decisión de la dirección nacional de Vox” para insistir en que “la inmensa mayoría de las personas de Vox de Castilla y León veían que el Gobierno estaba funcionando correctamente”. El presidente de Castilla y León consideró la decisión del dirigente de Vox de “extraña, ajena y alejada” de la Comunidad, porque fue “tomada en un despacho en Madrid”. “Las repercusiones vinculadas a esta decisión lo dicen bien a las claras”, agregó.

Alfonso Fernández Mañueco afirmó asimismo que la ruptura asumida por la dirección nacional de Vox estuvo fuera de los intereses de Castilla y León y el resto de autonomías afectadas y sentenció que “no se pueden tomar decisiones a espaldas de las personas que viven en un territorio, la democracia en España nos exige otros comportamientos”.

Mañueco, quien cifró en algo más de medio centenar los cargos afectados por la ruptura, defendió que el gobierno con Vox durante algo más de dos años estuvo “a la altura de las circunstancias” y generó “actividad económica y empleo” y “fortaleció servicios públicos” atendiendo a las familias, los niños y las personas mayores. “Hemos hecho una buena labor”, dijo, para agradecer el “buen trabajo” de los dos consejeros cesados, Mariano Veganzones y Gerardo Dueñas, y explicar que mantiene a Gonzalo Santonja “por una decisión de confianza personal”.

Alfonso Fernández Mañueco también consideró la decisión de Santiago Abascal, basándose en la acogida de menores migrantes, fue “simplemente una excusa” y la tachó de “absolutamente irresponsable y absurda” para afirmar que “sirve más como justificación de otras explicaciones que no se han dado”. “Cada uno responderá ante los ciudadanos de su territorio”, agregó.

Mañueco también criticó a Vox por sus “erráticas decisiones” que han impedido un Gobierno en España de centro derecha. Al respecto, explicó que el Partido Popular en España, representado en la persona de Alberto Núñez Feijóo, "está en la centralidad de este país, y tenemos que ensanchar esa base y contar cada vez con más personas a un lado y a otro”.

"Estoy convencido de que los votantes de Vox tomarán buena nota de esas decisiones erráticas”, dijo, para recordar que en Castilla y León, en las últimas elecciones autonómicas, Vox logró el 17 por ciento de apoyo, en las generales bajó al 13 por ciento, y en las europeas al diez. "Nosotros trasladamos un mensaje de firmeza, de confianza, y abrimos las manos y explicamos que nuestras políticas son eficaces para las personas".

Intención de “acabar la legislatura”

A partir de ahora, comentó a la emisora, comienza una nueva “andadura” desde la “certidumbre” que demandan las personas de esta tierra, con el “mismo rumbo fijado hacia el futuro”. En este sentido, sentenció que mantendrá el rumbo fijado y profundizó en su intención de “acabar la legislatura”.

En este contexto, remarcó que no tiene “miedo” al diálogo para mantener un gobierno en solitario con apoyo parlamentario de otras fuerzas, aunque dejó claro que para sacar adelante cualquier proyecto de ley, "solo hay dos formaciones relevantes: o PSOE o Vox”. Mañueco constató que el PP se instala en la centralidad, e intentará llegar a acuerdos con Vox, con el que han tenido un gobierno “más que digno".

El dirigente popular remarcó que ha presidido ya dos gobiernos de coalición con fuerzas políticas distintas y ha sido capaz de cerrar acuerdos con todas las formaciones del arco parlamentario, por lo que ahora "habrá que remangarse en el ámbito parlamentario, dialogar mucho y fajarse".

Mañueco espera "que el PSOE tenga una voluntad de diálogo que hasta ahora ha sido nula en la ultima legislatura”, pero insistió en pedir “una política de mano tendida a los que han sido mis socios" y a otras fuerzas locales que existen, con las que hablarán.

Críticas al PSOE

Mañueco se detuvo en la política migratoria del Gobierno y arremetió contra la “incompetencia” de Pedro Sánchez, y criticó la ausencia de diálogo con las autonomías. El presidente de Castilla y León advirtió de que en este asunto es necesario tener una “visión más amplia y global” que se adopte entre todos, pero sigue sin convocarse la conferencia de presidentes tras dos años. "Si esta cuestión es tan urgente, tan importante, quien debe dar el primer paso es el que tiene la responsabilidad, la competencia, la obligación, y en este caso, el Gobierno, pero Pedro Sánchez no ha movido ni un dedo", añadió.

Por último, analizó la situación generada por el leonesismo en instituciones como la Diputación provincial de León, para sentenciar que "lo que esta pasando ahora es una confrontación, una lucha de poderes dentro del Partido Socialista”. “La debilidad del liderazgo regional del PSOE es apabullante”, sentenció. Mañueco trasladó su "respeto absoluto a León” y reseñó que “tiene una tradición histórica, y desde el respeto más absoluto de la identidad que cada uno quiera tener, España no está en estos momentos para más barullos territoriales como los que ya tenemos”. “El mapa autonómico esta cerrado por los estatutos de autonomía que se integran en la Constitución Española", concluyó.