Primero fue el torneo del Toro de la Vega de Tordesillas, en Valladolid -animal al que no se puede ya dar muerte con lanzas como antes-, y ahora el Toro Júbilo de la localidad soriana de Medinaceli.

Los animalistas del PACMA prosiguen con su cruzada contra los festejos taurinos y, tras conseguir de momento que no se pueda matar al Toro de la Vega tordesillano, ahora han logrado que el Juzgado de lo Contencioso-Administrativo de Soria haya suspendido en la práctica el Toro Júbilo, al estimar la solicitud de medida cautelarísima instada por el PACMA contra la celebración del Toro Jubilo de Medinaceli (Soria) justo en el dñia en el que la Junta había dado luz verde al festejo de este año que estaba previsto para este sábado.

En su escrito, contra el que no cabe recurso, el magistrado considera "digno de mayor protección la integridad física, el bienestar y la vida del animal" que vaya a emplearse en esta edición del Toro Júbilo 2024 frente a la celebración tradicional, que estaba prevista para el próximo 16 de noviembre.

Según el juez, la tradición y determinados ritos "no pueden alzarse como un valladar infranqueable de la consideración actual de los animales como seres sintientes" y su debida y legal protección por la normativa europea y española.

Así, el magistrado hace prevalecer el derecho de los animales a su protección e integridad física y psíquica, a su bienestar, de acuerdo a las características de cada especie.

Respecto a la adopción de estas medidas "cautelarísimas", el magistrado explica esta premura en la cercanía de la celebración del festejo, dentro de apenas cuatro días.

Este mismo martes, la Junta de Castilla y León había autorizado la celebración del Toro Jubilo pese a que ya había una reciente sentencia de septiembre del Juzgado de lo Contencioso-Administrativo de Soria, que declaró ilegal la ordenanza municipal que regula el festejo.

Sin embargo, la Delegación Territorial en Soria se ha amparado en que dicha sentencia no es firme y en que está aún pendiente la resolución de los recursos de apelación presentados por la Junta y el propio Ayuntamiento de Medinaceli.

Por su parte, el partido animalista PACMA celebra la decisión de la Justicia y anuncia que mantendrá su manifestación prevista para el próximo 16 de noviembre en Medinaceli a las 18:00 horas, bajo el lema 'Apaguemos el fuego de la tortura' hasta conseguir que este festejo no se vuelva a celebrar nunca.

Tradición religiosa

El Toro Jubilo de Medinaceli es el único toro de fuego que se celebra en Castilla y León y fue declarado por la Junta en 2002 como espectáculo taurino tradicional, por existir constancia documental de su celebración desde el siglo XVI.

Envuelto el polémica desde hace años como el Toro de la Vega tordesillano, el festejo de Medinaceli coincide siempre con el día anterior a la festividad religiosa en honor de San Arcadio, Eutiquiano, Pascasio, Paulino y Probo, mártires cuyas reliquias, tal y como cuenta la tradición, fueron llevadas desde África a la villa medinense sobre un toro que portaba teas encendidas en sus cuernos.

Durante la celebración del rito del Toro Jubilo -término que proviene de sacrificio jubilar y jubileo o indulgencia, no de júbilo- el animal es atado a un madero y recubierto todo su cuerpo de barro arcilloso para evitar, según los organizadores, quemaduras.

En su cornamenta, los mozos colocan un asta metálica (gamella o astilla), que luce dos grandes bolas de pez, elaboradas con estopa, aguarrás y azufre, que son encendidas antes de liberar al toro, siempre cerca de la medianoche.