Detenidos por estafa y falsedad documental en Arroyo de la Encomienda

La Guardia Civil de Valladolid en el marco de la operación “LUCRAZA”, ha procedido a la detención de dos personas, como presuntas autoras de un delito de estafa y otro de falsedad documental, en la localidad de Arroyo de la Encomienda.

La Guardia Civil el pasado noviembre inició una investigación tras recibir una denuncia presentada por dos vecinos de Arroyo de la Encomienda. Los denunciantes explicaron que, después de buscar una empresa de rehabilitación de inmuebles por internet, concertaron una cita con el supuesto autor de los hechos. Tras aceptar su contratación, procedieron a pagar la cantidad de 2.585 euros, la mitad del presupuesto estimado para la reparación.

Sin embargo, con el paso de los meses y sin que se iniciaran las obras, los afectados decidieron presentar una denuncia. La Guardia Civil al tener conocimiento de los hechos llevó a cabo las diligencias necesarias para esclarecer el caso y determinar la responsabilidad del presunto estafador.

La Guardia Civil tras realizar numerosas gestiones, verificó que la empresa en cuestión era ficticia. Comprobaron que la supuesta sede social en Valladolid no existía y que no había ningún dato registrado en el registro mercantil ni en la seguridad social.

Tras confirmar la autoría de las personas implicadas y realizar las gestiones operativas necesarias, la Guardia Civil procedió a la fase de explotación de la operación. Se logró localizar y detener a los dos autores de los hechos. La Guardia Civil continúa las gestiones ante la posibilidad de que pudiera haber más personas perjudicadas por la supuesta empresa.

La Guardia Civil ha instruido las diligencias que fueron entregadas al Juzgado de Guardia de Valladolid.

Por otra parte, la Policía Nacional ha detenido a un hombre como presunto autor de un delito de robo con fuerza, perpetrado el pasado día 26 de enero por la mañana, en una tienda de ropa de Valladolid. Según la llamada a la sala CIMMAC del 091 que alertó a los agentes de policía, un testigo de los hechos había visto salir del interior de la tienda a dos individuos, cosa que le extrañó sobremanera, puesto que era domingo y el local debía de estar cerrado.

Igualmente la actitud de los dos hombres, llamó la atención a esta persona, que decidió llamar a la Policía Nacional. Cuando se personaron en el lugar las dotaciones policiales, comprobaron que efectivamente se había forzado la puerta de entrada del establecimiento y el interior estaba revuelto, si bien los autores ya se habían marchado. El testigo facilitó la descripción de los dos hombres y en el lugar se personó una responsable del establecimiento comercial, que posteriormente presentó denuncia en las dependencias policiales, echando en falta unos trescientos euros en efectivo de la caja registradora y tres teléfonos móviles.

Los investigadores de la Policía Nacional gracias a la descripción aportada por el testigo, pudieron determinar plenamente la identidad del detenido, y se facilitó una descripción para el resto de unidades policiales, interesando la localización y detención del hombre. El día 27 de enero, una patrulla policial uniformada, realizando labores de seguridad ciudadana, localizó al varón en la vía pública y procedió a su detención por un delito de robo con fuerza y lo trasladó a dependencias policiales.