Procesión del camino del Calvario: un recorrido por calles medievales que la convierten en la más espectacular de Castilla-La Mancha
Las turbas de Cuenca protagonizan una de las procesiones más imponentes y pasionales de la región castellanomanchega
La procesión del camino del Calvario de la ciudad de Cuenca reúne cada año a miles de visitantes aclamados por el contraste producido por el paso del estruendo de las turbas al silencio y viceversa.
En este sentido, el próximo 29 de marzo, viernes santo, a las 5.30 horas de la madrugada desde la Iglesia de El Salvador, el paso de Jesús Nazareno partirá hacia la plaza del El Salvador donde antes de la seis de la madrugada, las miles de turbas lo recibirán con un enorme ruido de tambores y clarines.
¿Qué son las turbas de Cuenca? Se trata de un grupo de Nazarenos de la ciudad conquense vinculado a la Hermandad de Jesús Nazareno del Salvador que durante la procesión del camino del Calvario representan el escarnio y la mofa a la que fue sometido Jesús cuando era conducido al Calvario para su crucifixión.
Las primeras turbas estaban compuestas por seis tambores, seis clarines y un maestre de las turbas. Sin embargo ahora son miles las turbas que se congregan cada viernes santo para vivir de forma pasional e intensa esta tradición tan arraigada en la ciudad de Cuenca.
Una vez los pasos del Jesús de Nazareno y del Jesús y la Verónica han llegado a la plaza de El Salvador, la Turba anuncia con sus tambores y clarines la salida de la siguiente imagen, el Evangelista que estará acompañado por la Asociación Musical La Concepción, de Horcajo de Santiago.
Inmediatamente después el silencio protagoniza las calles medievales de Cuenca para presenciar los dos pasos de la Hermandad de Nuestra Señora de la Soledad (de San Agustín): El Encuentro de Jesús y la Virgen Camino del Calvario y Nuestra Señora de la Soledad.
La procesión del camino del Calvario continúa por las calles de San Vicente y Alonso de Ojeda, Puerta de Valencia, Torres y Aguirre, Plaza de la Hispanidad, Carretería, Plaza de la Constitución, Calderón de la Barca hasta llegar a la Plaza de la Trinidad desde donde comienza la subida por las calles Palafox, San Juan, Peso y Solera, Andrés de Cabrera y Alfonso VIII hasta que concluye en el punto de inicio, la Iglesia de El Salvador.
La pasión por esta procesión en la ciudad de Cuenca es casi palpable, por ello, es realmente impresionante presenciar ese contraste del estruendo generado por las turbas cuando pasa el Jesús de la Seis y el imponente silencio que se forma cuando la Señora de la Soledad inunda con su presencia las calles conquenses.