Exhibición de fuerza de la Policía en las Tres Mil Viviendas de Sevilla tras los tiroteos

Helicópteros, drones, guías caninos, antidisturbios, agentes antidroga, armas largas, agentes de asalto a viviendas, policías de paisano, patrulleros de Seguridad Ciudadana, medio centenar de vehículos policiales... Si no es una reacción a las críticas por la inseguridad creciente, se le parece bastante. La Subdelegación del Gobierno asegura que la actuación estaba prevista y que los últimos acontecimientos han incrementado el operativo pero lo cierto es que el despliegue de 300 policías nacionales en la barriada de las Tres Mil Viviendas del Polígono Sur de Sevilla, con diez detenidos al cierre de esta edición, se corresponde cronológicamente con el principio de acción y reacción. El fin de semana se produjo un tiroteo en las Tres Mil entre dos clanes –se baraja un vuelco de droga como detonante, entre las principales hipótesis–, el Ayuntamiento y la Junta de Andalucía reclamaron más seguridad en la barriada, la Delegación del Gobierno habló de un refuerzo de agentes para evitar «una revancha» y una jornada después tres centenares de agentes tomaron el barrio en una demostración de fuerza a modo de aviso a la población para evitar la sensación y el efecto de «ciudad sin ley».

Más de 300 policías nacionales tomaron desde primera hora de la mañana del miércoles el barrio de las Tres Mil Viviendas. La Policía ejecutó una macrooperación en distintos puntos de la barriada, hasta el momento saldada con diez detenciones y la intervención de armas y droga. Los agentes acordonaron las principales entradas al Polígono Sur y realizaron controles a todos los vehículos que pasaban por la zona. Había áreas en las que no se podía pasar ni a pie. Se produjeron no menos de 16 registros, según informó el subdelegado del Gobierno en Sevilla, Francisco Toscano, quien informó de que en esta operación ya estaba planificada con antelación pero que se ha «amplificado e intensificado» tras lo ocurrido este pasado fin de semana. En el operativo de control de los accesos a la barriada se ha decomisado además distinto «material no permitido», aunque Toscano no precisó que se trate de armas de combate como las utilizadas el sábado en las Tres Mil y que se viralizaron por las redes sociales. El subdelegado del Gobierno también desmintió que se hayan producido nuevos tiroteos, señalando que otras llamadas de emergencia posteriores fueron en relación a «material pirotécnico».

El enfrentamiento armado del sábado tuvo lugar en la zona de Los Verdes, de la barriada de Murillo, en la que predominan plantaciones de marihuana y enganches ilegales, y la Policía tomó la zona, en al que habita el clan de Los Caracoleños, supuestamente implicado en el tiroteo en el que se hallaron hasta balas de kalashnikov. En la zona de Los Marrones también hubo registros. El otro clan presuntamente implicado es el de Los Naranjeros. También hubo registros en Las Vegas, en la barriada de Martínez Montañés.

Toscano envió un «mensaje a los vecinos de bien» del Polígono Sur, a quienes recordó que «pueden contar» con el Gobierno de España. «Cada vez que la Policía Nacional considere que, desde el punto de vista operativo, es necesario realizar operaciones de este tipo, se harán», señaló. «Lo que tenemos que hacer es defender y garantizar que puedan desarrollar correctamente todo su trabajo. El Gobierno de España no elude sus responsabilidades y esta es una muestra más de que cumple sus funciones», recalcó en respuesta a las críticas por parte del Ayuntamiento.

Por otra parte, después de que el alcalde, José Luis Sanz, le pidiera una reunión urgente, Toscano indicó que considerar que la realidad de esta zona de la capital se circunscribe exclusivamente a un problema de seguridad supone equivocarse: «El Polígono Sur sigue ocupando los últimos puestos en materia de pobreza en todo el conjunto del Estado», argumentó el subdelegado del Gobierno.

Toscano añadió que, si no se aplican políticas de vivienda, urbanísticas, acciones de empleo y se desarrolla íntegramente una labor, teme que dentro de unos meses volverá a hablarse de un «hecho desgraciado» como el del pasado sábado y se volverá «a la casilla de salida», recogió Efe.

Urge «una ampliación de efectivos»

El consejero de la Presidencia, Interior, Diálogo Social y Simplificación Administrativa, Antonio Sanz, reclamó al Gobierno central una «reacción contundente» en materia de seguridad ante el último y notorio tiroteo acontecido en el Polígono Sur. En una entrevista en Canal Sur Radio, el consejero de Presidencia evaluó la situación y señaló que en las Tres Mil Viviendas pesa «un problema mucho más amplio» con vertientes en lo social, educativo y de vivienda, si bien esta situación suscitada este último fin de semana, que el Comisionado del Polígono Sur, Jaime Bretón, ha atribuido a un enfrentamiento entre clanes por disputas de drogas, «es un problema de seguridad». Sanz aboga por «una ampliación de efectivos» policiales pero «con dotación de material, con medios suficientes».

Por su parte, el Gobierno Municipal del PP exigió al PSOE que no utilice al Polígono Sur para hacer política y que no desvíen el problema de la seguridad. El portavoz del Grupo Popular, Juan Bueno, recordó a Antonio Muñoz que ha sido el alcalde José Luis Sanz quien lleva meses pidiendo una reunión al ministro del Interior. «Es completamente falso que este Gobierno haya ordenado a los servicios municipales que dejen de actuar en esta zona de la ciudad, además nos parece una falta total de responsabilidad por parte del PSOE utilizar esta situación, en vez de velar por el bienestar y seguridad de los vecinos del Polígono Sur», señaló. De su lado, el socialista Antonio Muñoz afeó a José Luis Sanz «dejación de funciones» en el Polígono Sur «por mero rédito político».