Servicios sociales
Andalucía ayudará con 5.000 euros anuales a los huérfanos por violencia machista
Esta pensión, cuya partida presupuestaria estará incluida en los próximos presupuestos de la comunidad, la cobrarán lo menores anualmente hasta alcanzar la mayoría de edad
La mujer asesinada el pasado martes en Benalmádena (Málaga) a manos de su marido, que luego se quitó la vida, deja tres hijos huérfanos, uno de ellos menor de edad. Se trata de la víctima número 17 de la violencia machista en Andalucía en lo que va de año. El pasado verano fue especialmente dramático, con hijos que presenciaron el asesinato de sus madres con el consiguiente impacto psicológico y con consecuencias que muchas veces arrastran a lo largo de su adolescencia y juventud. Con el objetivo de respaldar a estos niños, que también son víctimas de esta lacra, el proyecto de presupuestos autonómicos para 2024, que se presentarán en el Parlamento andaluz a finales de este mes, recogerá una partida para destinar 5.000 euros de pensión a los huérfanos de la violencia machista. Así lo anunció el presidente de la Junta, Juanma Moreno, en la sesión de control al Gobierno andaluz en la Cámara.
Contestaba así Moreno a una pregunta del secretario general del PSOE-A, Juan Espadas, que requería información sobre las prioridades y principales inversiones que se recogerán en las próximas cuentas autonómicas. Moreno aseguró que serán «equilibradas y sociales» y que fortalecerá los servicios públicos de la comunidad autónoma. En este sentido, «avanzarán» en las políticas sociales, anunciando que habrá una partida especial que se destinará a una pensión de 5.000 euros para los huérfanos de la violencia machista. En concreto, la prestación la podrán solicitar todos los huérfanos menores de edad y la cobrarán anualmente hasta alcanzar la mayoría de edad. Sobre el número de beneficiarios, fuentes de la Consejería de Inclusión Social indicaron que sólo desde 2013 se tiene estadística de estos huérfanos, pero que, obviamente, puede haber niños o niñas cuyas madres fueran asesinadas antes de ese año, siendo muy pequeños, y por tanto con derecho a solicitar la nueva prestación.
Desde el año 2013, en la comunidad autónoma hay contabilizados un total de 87 huérfanos por violencia machista y las mismas fuentes calculan que, añadiendo los que no están contabilizados porque quedaron huérfanos antes del año 2013, superan con creces el centenar.
El pasado mes de septiembre el Defensor del Pueblo Andaluz, Jesús Maeztu, reclamó un mayor acompañamiento psicológico, especializado y específico para los niños huérfanos por la violencia machista y sus familias, además de ayudas económicas públicas y mejoras en la información disponible sobre la situación en la que quedan. «La sociedad y los poderes públicos no pudieron proteger a sus madres, pero sí deben ayudar a estos niños y niñas a superar el trauma, reparar el daño y garantizarles un futuro digno», dijo Maeztu en la entrega al presidente del Parlamento andaluz, Jesús Aguirre, del informe anual de infancia y adolescencia 2022, que incluye como capítulo relevante un estudio sobre la infancia huérfana por la violencia machista.
Maeztu consideró que «estos niños y niñas necesitan una atención propia, especializada y adaptada a sus características y necesidades específicas» porque, además, «les ha tocado vivir uno de los mayores dramas a los que se puede enfrentar el ser humano: en muchas ocasiones, ser el hijo o hija del asesino de su madre».
Desde 2003 –año en el que se incluyó a los menores en las estadísticas oficiales– y hasta la elaboración de este informe elaborado por el Defensor del Pueblo, el número de niños que se han quedado huérfanos por violencia machista se elevó a 388, 75 de ellos en Andalucía, según datos ofrecidos por la Delegación del Gobierno contra la Violencia de Género, el Observatorio estatal de violencia sobre la mujer y las memorias anuales que elabora la Fiscalía.
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