Transformación digital

La TDT se reinventa: nuevo canal, 4K obligatorio y una guerra por la frecuencia libre

El Consejo de Ministros ha aprobado un ambicioso plan técnico que reorganiza el espectro televisivo y marca el inicio de las emisiones en Ultra Alta Definición en la TDT

Aprobado el Plan Nacional de TDT para lanzar UHD y paso previo para licitar un nuevo canal en abierto
Aprobado el Plan Nacional de TDT para lanzar UHD y paso previo para licitar un nuevo canal en abiertoEuropa Press

La TDT vuelve a moverse. Y esta vez no es un ajuste menor. El Gobierno ha aprobado este martes un nuevo Plan Técnico Nacional que remueve las piezas del tablero televisivo con dos objetivos claros: liberar espacio para una nueva licencia nacional en abierto y poner rumbo definitivo a las emisiones en Ultra Alta Definición (UHD). Traducido: habrá nuevo canal y se acabó el 1080p como estándar. Llega el 4K a la televisión en abierto.

El cambio no es inmediato, pero sí inminente. El Ejecutivo quiere adjudicar la nueva licencia antes del verano, lo que ha despertado un apetito evidente en el sector. Entre los candidatos con más opciones están el proyecto impulsado por José Miguel Contreras y Andrés Varela —que apuestan por un modelo de televisión sostenible y de bajo coste—, así como los gigantes tradicionales: Atresmedia, Mediaset y Grupo Godó. Telefónica también aparece como potencial aspirante, aunque oficialmente asegura que no tiene intención de volver a la televisión en abierto… al menos, de momento.

La clave técnica de esta transformación está en la implantación del sistema DVB-T2, el nuevo estándar europeo que permite emitir en UHD con mayor eficiencia espectral. RTVE, Atresmedia y Mediaset recibirán licencias específicas para operar en esta nueva calidad: La 1 UHD y Teledeporte o La 2, por parte de RTVE; Antena 3 por parte de Atresmedia; y Telecinco en el caso de Mediaset. El proceso será progresivo, pero tiene una fecha marcada: el curso televisivo 2025-2026 podría arrancar ya con la nueva frecuencia en funcionamiento.

El primer movimiento se dará en el múltiplex RGE2, donde se estrenará la tecnología DVB-T2. RTVE verá reducido su espacio allí —de tres cuartas partes a la mitad— mientras Atresmedia y Mediaset ocuparán el resto. Esto obligará a liberar el múltiplex MP5, dejando margen para la llegada del nuevo canal en abierto. A medio plazo, todos los múltiplex tendrán que migrar a DVB-T2, una vez que el parque de televisores compatibles sea suficiente. Y sí, eso implicará una nueva resintonización para los hogares españoles.

En este rediseño del espectro no todos siguen en la carrera. El Grupo Prisa, que en un principio figuraba como uno de los favoritos para optar a la nueva frecuencia, ha decidido finalmente no participar por desacuerdos internos. Esto allana el camino para la propuesta de Contreras y Varela, que busca hacerse un hueco con un canal de televisión de proximidad, menos dependiente de grandes presupuestos, pero con vocación de audiencias sólidas.

Más allá de los movimientos empresariales, el nuevo plan técnico también busca modernizar la infraestructura de la televisión digital terrestre en España, alineándola con los estándares europeos y preparando el terreno para lo que ya no es futuro, sino presente. Porque si hasta ahora la televisión lineal resistía los embates del streaming, ahora al menos podrá competir con algo más que voluntad: podrá hacerlo con calidad de imagen real.