La ciudad siciliana de Taormina está viviendo su explosión turística y no solo por ser una bellísima ciudad italiana de la costa este de la isla, en la provincia de Mesina, si no por albergar el espectacular escenario de una de las series favoritas de los espectadores de HBO Max: "The White Lotus".

Si la primera temporada de la serie nos ubicaba en Maui (Four Seasons Resort Maui en Wailea) con el gerente Armond y su embarazada empleada Lani, en la segunda entrega nos entregaremos a Valentina para disfrutar de esta maravilla de hotel ubicado en una población en un acantilado a 205 metros sobre el mar Jónico. Ya de por sí la ciudad parece encantada con un laberinto de pequeñas calles empedradas, plazas de cuento y largas escaleras de piedra.

Evidentemente Taormina ya era turística antes de la llegada de los huéspedes, desde que los jóvenes adinerados del siglo XVIII hacían la ruta entre Venecia y Sicilia. Su segundo explendor le llegó con el barón alemán Wilhelm von Gloeden, que a finales del siglo XIX concibió imágenes homoeróticas de jóvenes posando en la ciudad y los alrededores.

Ahora, una nueva generación de viajeros se acerca a la ciudad buscando los escenarios de la segunda temporada de "The White Lotus". Y muchos de ellos lo que quieren es poder hospedarse y ver los lugares donde se han cometido, o no, atrocidades, o no. Hablamos del Hotel San Domenico Palace de Four Seasons, el lugar del crimen. Inaugurado en 2021, se construyó sobre un convento dominico del siglo IV y su primera apertura como hotel fue en 1896. La existencia de estos viajes de ricos del Grand Tour le dio prestigio y hasta el hotel llegaron estrellas de Hollywood y escritores y artistas.

En realidad es un hotel de gran lujo, con sus 111 habitaciones y suites, 19 de las cuales tienen piscinas de inmersión privadas. La famosa Suite real por su parte goza de una gran terraza y piscina con vistas al Etna, el teatro griego y el mar Jónico. Entre las instalaciones cuenta con un gimnasio, un rincón de belleza y una piscina del hotel. Las habitaciones están decoradas en relajantes tonos neutros con sábanas limpias y acabados de lujo.

Claramente la valoración de los visitantes es acorde a su experiencia y en Booking el hotel tiene 9,6 sobre 10 y cinco estrellas. Y el precio, acorde. Si lo que buscamos es una habitación barata, aquella es en noviembre al final de temporada y su valor por encima de 1.000 euros. Si ya queremos ir en el mejor momento de abril a septiembre, hablamos de entre 2.000 euros por noche hasta más de 4.500. Todas las habitaciones tienen bañeras de hidromasaje, baños privados, televisores de pantalla plana, insonorización WiFi y máquinas de café.