El actor y director de cine Eduardo Casanova fue el expulsado del séptimo programa de la octava edición de 'MasterChef Celebrity'tras fracasar en la réplica de una tarta en la prueba definitiva. El creador de 'Pieles' dijo adiós pero se llevó el cariño, merecido, de sus compañeros y de la audiencia. Y, sobre todo, se marchó con un beso en la boca de Jesulín de Ubrique. Es probable que sea el único homosexual de España que pueda decir eso.

El calificado como "momento histórico" por jueces y concursantes ocurrió en el impasse entre la prueba grupal de exteriores y el reto de eliminación, al que se enfrentaron los delantales negros, antes mandiles rojos: Toñi Moreno, Blanca Romero, Laura Londoño y el propio Eduardo Casanova.

A Jesulín, el más estratega y sincero de la presente edición del talent culinario de TVE, le preguntó Jordi Cruz quién quería que se fuese a casa anoche. El torero, sin pensárselo mucho, dijo el nombre de Laura Londoño: "que se vaya con el pin de la inmunidad puesto y todo".

Pero antes salvó de la quema a Toñi Moreno, que fue novieta suya de adolescencia, quien le dio un besito en los labios al diestro gaditano. De el joven director de cine afirmó que le encanta "cuando pierde el rumbo", ante lo que Casanova reaccionó pidiéndole un pico también a Jesulín.

El torero le hizo varias cobras a Casanova, pero al final este se salió con la suya y se le plantó un beso en los morros al torero. "Esto es histórico. Las dos Españas", dijo el actor incrédulo y contento. "Besa muy bien, ahora lo entiendo todo", añadió con gracia.

Por su parte, Jesulín de Ubrique confesó que lo que está haciendo en 'MasterChef' "pensaba que no lo iba a hacer en la vida".