Miyako se encontraba de vacaciones con su familia en Malta a finales de 2018 cuando decidió meterse al mar hasta que el impacto de una ola le destrozó la vida.

Unas vacaciones en Malta se convirtieron en una auténtica pesadilla para Miyako Aiko-Murray, una estudiante británica de 20 años. La joven se quedó ciega por una fuerte infección ocular que le provocó la pérdida de visión y que desarrolló después de meterse al mar con las lentillas puestas.

Miyako, natural de Londres, se encontraba de viaje con su familia en la isla a finales de 2018 cuando decidió meterse al mar. El impacto de una ola le destrozó la vida. Comenzó a sufrir migrañas y un dolor como “si tuviera metal en los ojos”.

Cada vez que acudía al médico, los especialistas le restaban importancia a la dolencia de la joven y le daban algún tratamiento, pero no analizaban a fondo lo que le sucedía a a Miyako. “Cuando fui al médico no investigaron lo que me pasaba. Me mandaban a casa a los cinco minutos”, lamenta la estudiante en declaraciones al diario británico ‘Metro’.

Sin embargo, un día todo cambió. Se despertó sin poder ver absolutamente nada después de que aumentaran las cicatrices por encima de la infección. “Con el tiempo las cicatrices crecieron y crecieron. Un día me desperté y me di cuenta de que no podía ver nada. Incluso cuando encendí las luces no veía”, explica con tristeza la joven.

Después de visitar a varios especialistas durante meses, le diagnosticaron Ancanthamoeba Keratitis. Se trata de una infección poco común que daña la parte frontal del ojo. Ahora Miyako requiere un trasplante de córnea para poder volver a recuperar su vida.

Como Miyako tuvo que abandonar su trabajo, asegura que le cuesta hacer frente a los gastos de su tratamiento y, por ese motivo, decidió crear un evento en la plataforma ‘GoFundme’ para dar a conocer su enfermedad y recaudar dinero. De momento, ya ha conseguido 5.000 libras (unos 5.670 euros) en apenas tres días.