Save the Children pide un cómputo de casos de violencia infantil, igual al de género

La organización Save the Children ha demandado una ley integral contra la violencia ejercida contra la infancia que, al igual que la ley integral de violencia de género, conlleve una contabilidad de los casos de niños maltratados. Así lo ha pedido hoy el responsable de esta organización en Andalucía, Javier Cuenca, tras la firma de un convenio marco con el Defensor del Menor en Andalucía, Jesús Maeztu, y al asegurar que el fenómeno de la violencia contra la infancia "es de tal dimensión que exige una ley integral propia".

El fenómeno de la violencia sufrida por los niños tiene varias vertientes, la que ejercen contra ellos los adultos, la que ejercen otros niños -denominada "entre iguales"- y la llamada "violencia institucional", según ha explicado Javier Cuenca, quien ha puesto como ejemplo que, en España, el 37 % de los escolares declaran haber sido víctimas de acoso escolar. Save the Children trabaja, a través de los servicios sociales municipales, con 600 menores en Sevilla y el próximo curso empezará a hacerlo en Cádiz, y el perfil de estos niños en situación de exclusión social es el de ser hijos de padres en desempleo o formar parte de familias monoparentales en situación de pobreza o incluso pobreza severa.

Estos niños, ha asegurado Javier Cuenca, padecen una baja autoestima y, en casos, habilidades sociales nulas. Jesús Maeztu, también Defensor del Pueblo Andaluz, ha asegurado que el maltrato infantil es un fenómeno que "no está visualizado, ni está en el debate social", algo que pretende corregir el convenio suscrito hoy mediante actividades de formación y sensibilización, como unas jornadas sobre acoso y ciberacoso que se celebrará este año.

Según ha asegurado Maeztu en conferencia de prensa, "hay que meter en el debate social lo que pasa con los menores"porque "lo que se incuba a esas edades relacionado con la violencia de género o la delincuencia"aflorará más tarde y los menos "son el futuro, y el futuro de la sociedad". "No son sólo chiquillos, son sujetos de derechos, personas merecedoras del respeto a sus derechos", ha añadido el Defensor del Menor sobre los niños.

Maeztu ha calificado de "momento de oportunidad"en el que se firma este convenio, al considerar que los menores han sido las principales víctimas de la crisis económica y porque el maltrato infantil es una "violencia multidireccional"que va desde la trata de menores a su abandono o el acoso escolar, muchos de estos casos se han multiplicado en los tiempos de penuria. Sólo relacionadas con situaciones de pobreza infantil, el Defensor del Menor recibió 792 quejas formales y algo más de dos mil consultas a lo largo del año pasado. El Defensor del Menor atiende igualmente quejas relacionadas con la situación de menores infractores y de inmigrantes menores de edad en situación irregular.