La Guardia Civil ha desmantelado una organización de tráfico de drogas que operaba entre la Península y Canarias y ha detenido a quince personas entre Madrid, Lanzarote, Tenerife y Gran Canaria. Una nota de la Guardia Civil informa de que la operación Gatillo se inició en junio de 2013 cuando se averiguó que la red, por vía aérea y utilizando "mulas", trasladaba la droga desde Madrid a las islas de Fuerteventura y Lanzarote en vía aérea y luego utilizaban la vía marítima entre Tenerife y Gran Canaria.

En el operativo de vigilancia, los agentes interceptaron algunos de los envíos realizados e intervinieron cuatro kilogramos de cocaína. Según la Guardia Civil, el grueso de la estructura criminal afincada en Madrid y Lanzarote, adquiría la droga a narcotraficantes suramericanos y posteriormente entregaba la sustancia para su distribución a los demás miembros de la organización asentados en Tenerife y Gran Canaria.

En la fase de explotación se hicieron seis registros domiciliarios en las localidades de Leganés (Madrid), Arrecife (Lanzarote), Santa Cruz de Tenerife, San Cristóbal de La Laguna (Tenerife) y en Santa Lucía de Tirajana (Gran Canaria). En estos registros se intervinieron aproximadamente otros tres kilos de cocaína, 103.000 euros en efectivo, dos vehículos y diversidad de material informático.

La nota añade que en el registro practicado en Leganés (Madrid), la Guardia Civil halló un laboratorio clandestino dotado de gran cantidad de productos químicos para la adulteración de la droga, prensas, máquinas de envasar, medios de pesaje y otros utensilios. La operación, dirigida por el Juzgado de Instrucción número uno de los de Telde (Las Palmas), ha sido llevada por agentes del Equipo Contra el Crimen Organizado (ECO) con sede en Las Palmas de Gran Canaria, apoyados por otras unidades territoriales de la Guardia Civil de las provincias de actuación.