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Opinión

Pros y contras de la espermidina

Parecen demostradas sus propiedades antioxidantes y antiinflamatorias, aunque también está aumentada en pacientes con alzhéimer

La investigación se ha fijado ahora en la espermidina Eduardo ParraEuropa Press

Se ha sabido estos días que la espermidina, presente de manera natural en el esperma, las bacterias intestinales y algunas células, ayuda a rejuvenecer los ovarios y mejorar la fertilidad, tras ensayos de experimentación en ratones presentada por «NatureAging». El problema es que, como en el caso de la melatonina, a medida que envejecemos producimos menos cantidad de esta sustancia, aislada por primera vez a partir del semen. Está en las células vivas, se produce de manera natural y parecen demostradas sus propiedades antioxidantes y antiinflamatorias, pudiendo contribuir a la regulación de la longevidad, amén de ser útil en la prevención de alergias, diabetes, función cerebral, cáncer de mama, colon y próstata, y combatiendo la senescencia tras la menopausia. El problema es que también tendría su cara B negativa, dado que científicos del CSIC han demostrado que en los pacientes con alzhéimer, por ejemplo, los niveles de espermidina están aumentados.

Desarrollando la parte positiva, y a la pregunta de si podría la espermidina retrasar el envejecimiento, responden los protagonistas del primer estudio que puede regular la longevidad en mamíferos por la autofagia (limpieza de las células), la reducción de inflamación, la mejora en el metabolismo de lípidos (grasas) y disminuyendo la muerte celular. Dice el estudio que se ha comprobado que incrementa la longevidad en ratones en un 10% al generar en el organismo un efecto similar al de la restricción calórica.

Pero los científicos del CSIC llegaron también a la conclusión de que la espermina, y su precursora, la espermidina, pueden agravar patologías como el alzhéimer, la epilepsia, isquemias u otras patologías neurodegenerativas, aunque para ello se tiene que dar en administración conjunta con glutamato, pues ambos compuestos «son inocuos en dosis por separado, pero juntos inducen a la muerte neuronal».