La primera maternidad de Madrid celebra su centenario

Pocos hospitales pueden presumir de tener un siglo de historia, pero tal es el caso del Hospital Santa Cristina, de Madrid, que este 2024 celebra su centenario como centro de salud en el mismo lugar en el que fue construido y sin perder su propia esencia.

Fue allá en el año 1902 cuando el doctor José Gálvez Ginachero, ginecólogo de prestigio, presentó a la reina regente, María Cristina de Habsburgo, la idea de crear en Madrid un centro moderno y dotado de los grandes avances del momento, con carácter benéfico y docente, y dedicado a prestar asistencia obstétrica y ginecológica a las mujeres madrileñas desvalidas y a los recién nacidos.

Concebido para convertirse en el primer centro en el que cualquier mujer parturienta podía dar a luz y ser atendida por los mejores sanitarios de la época, gracias a los últimos avances de la ciencia obstétrica, el hospital albergó, además, la que fue la primera Escuela de Matronas de España.

Centro pionero

Y es que el Gálvez Ginachero fue todo un innovador al proyectar un centro en el que se prestaba el mejor servicio posible a las futuras madres de mano de personal médico con conocimientos específicos. Algo que, aunque hoy pueda parecer obvio, no lo era ni mucho menos en esa época, donde las tasas de mortalidad tanto de las madres como de los bebés era muy elevada.

Así, y tras 20 años de obras, el recinto asistencial se inauguró oficialmente el 28 de junio de 1924, en un acto presidido por los reyes Alfonso XIII y Victoria Eugenia de Battemberg y la presencia de la madre del monarca. La denominación inicial fue Casa de Salud y Escuela de Matronas de Santa Cristina, rótulo que aún se conserva en la fachada del edificio principal. Y aunque ya no instruye a matronas desde hace 37 años, aún se pueden ver alguno de los materiales empleados en la formación de estas profesionales en las vitrinas del inmueble.

Y desde julio de 2004 la atención a partos se trasladó a la Maternidad del Hospital General Gregorio Marañón, pero entre 1924 y 2004 nacieron en él un total de 348.444 niños, si bien su actividad actual sigue muy centrada en la atención de la mujer.

Quizás por eso el último acto de celebración del año del centenario podríamos decir que es la guinda que viene a cerrar el círculo: «Mañana, viernes 13 de diciembre, acogemos un congreso de Ginecología, que fue el servicio que inauguró el hospital», cuenta Guillermo Ceñal, director gerente del Hospital Santa Cristina de Madrid, quien, además, el día 9 cumplió justo cuatro años al frente de la institución.

Y es que en los años posteriores Santa Cristina llegó a albergar unidades pioneras como la de Cuidados Intensivos Neonatales, en 1973; la de Atención Temprana en 1974 para niños de 0 a 4 años con alteraciones del desarrollo, o la Consulta de Esterilidad, en 1976.

En el año 1987, se incorporó al Instituto Nacional de la Salud (Insalud) con nuevas especialidades médicas como parte de la red de apoyo hospitalario público madrileño, pasando a formar parte del Servicio Madrileño de Salud (Sermas) en 2001.

Desde entonces, su crecimiento asistencial generó nuevas necesidades funcionales que hicieron necesaria la total remodelación del recinto principal (Edificio A) que no ha perdido su esencia arquitectónica catalogado desde 1999 como Bien de Interés Cultural, así como la ampliación del centro en el solar colindante, construyéndose el denominado Edificio B, cuyas obras finalizaron en 2001 dando al complejo la estructura que tiene hoy en día.

Mantener la esencia

Si en el pasado el hospital llegó a tener hasta 300 camas, hoy en día cuenta con «156 instaladas, 125 funcionando, porque Cuidados Paliativos requiere de habitaciones individuales, lo que es una de nuestras particularidades y la oferta diferencial de otras unidades paliativos», explica Ceñal.

Sostiene, además, que «la carga histórica se lleva con mucho orgullo» y que «las referencias en la atención al paciente siempre son buenas. Mucha gente se piensa que es privado por las instalaciones que son y por lo cuidado que está y también por lo vanguardista», asegura.

Así a día de hoy Santa Cristina cuenta con seis servicios de Cirugía (General y Digestiva, Ortopédica, Ginecología, Urología, Oftalmología y Plástica), otros diez médicos (Cardiología, Digestivo, Endocrinología, Geriatría, Hematología, Medicina Interna, Neumología, Neurofisiología, Psicología y Reumatología) y cuatro centrales (Anestesia y Reanimación, Diagnóstico por Imagen, Análisis Clínicos y Anatomía Patológica).

También con cinco unidades especiales, entre las que destacan la de Trastornos de la Conducta Alimentaria, pionera en la región en el tratamiento de estos problemas en adultos; otra de Cuidados Paliativos, con 31 habitaciones individuales, y una de Continuidad de Cuidados, con 23 camas. Una labor muy importante que contribuye a agilizar a las intervenciones quirúrgicas y pruebas diagnósticas más demandadas, reduciendo así las listas de espera de la comunidad.

Además, sus profesionales del área de investigación están integrados en el Instituto de Investigación Sanitaria del Hospital público La Princesa, y ha puesto en marcha Escuelas de Pacientes, como las de Suelo Pélvico y Rodilla y Cuidadores en Cuidados Paliativos.

Tras comenzar su andadura como Casa de Salud, y después de un siglo, en 2023 se han atendido 120.000 consultas, con más de 13.000 operaciones, el 80% de ellas sin ingreso «centrados en la atención al paciente».

El futuro

En la actualidad un total de 800 trabajadores siguen, diariamente, escribiendo esta historia de salud, cuidados, cercanía y humanización, «en una de las instituciones sanitarias más queridas y emblemáticas de la Comunidad de Madrid», tal y como aseguró la consejera de Sanidad de la Comunidad de Madrid, Fátima Matute, en uno de los actos conmemorativos de su centenario.

Pero Santa Cristina, lejos de vivir de las rentas y de su pasado histórico, mira al futuro con nuevos proyectos y centrado en su especial visión de lo que es la atención médica. Así en 2025 acogerá una Unidad para enfermos de esclerosis lateral amiotrófica (ELA).

Además, fiel a su legado, han participado en el plan integral de atención a la mujer que se está empezando a gestar en la Comunidad de Madrid, «aportando todo lo que nuestro hospital puede aportar a las mujeres. Ese plan esta en ciernes y aún en una fase muy inicial, pero queremos tener cierto protagonismo porque abordamos muchas áreas de cuidado de la mujer, como los cribados de cáncer de mama, de cérvix o cirugías más complejas como de preservación de fertilidad en cáncer de cérvix», concluye Ceñal.