El superalimento que frena la caída del cabello, retrasa el envejecimiento y baja el colesterol

Llevar un estilo de vida saludable es beneficioso para el organismo y ayuda a alargar la vida. El deporte, seguir la dieta mediterránea y beber suficiente agua permiten controlar el peso y favorecer la buena salud de nuestros órganos. Uno de los puntos más importantes es la alimentación. Llevar una dieta equilibrada, baja en sal y en azúcares y rica en verduras, carnes magras, pescado azul, cereales y frutos secos aporta los suficientes nutrientes y vitaminas para mantener el cuerpo sano y con energía. También es recomendable evitar o reducir al máximo la ingesta de bebidas alcohólicas y dar mayor protagonismo a las proteínas que a los hidratos de carbono.

Además, si se recurre a los superalimentos, los beneficios serán aún mayores. Los más conocidos son el pistacho, la pimienta negra, los boniatos, las nueces, el apio, los puerros, el huevo o las espinacas, pero también hay otros menos utilizados como el picante, la zizania. la granada, el té verde, las algas, el aloe vera o el jengibre, que además de ser unos grandes aliados para la pérdida de peso, son muy beneficiosos para el metabolismo, el sistema circulatorio e incluso para prevenir enfermedades degenerativas como el alzheimer.

Uno de los superalimentos menos conocidos es el pequi, una fruta tropical originaria de Brasil que, además de proteger contra enfermedades cardiovasculares, ayuda a reducir el colesterol, combate la caída del cabello, mejora la hipertensión, retrasa en envejecimiento de la piel y es una fruta antinflamatoria, ideal para los deportistas porque previene las lesiones.

El pequi está presente en toda la Amazonia y su árbol puede alcanzar hasta los 50 metros de altura. Sus frutas son grandes y son color amarillo rojizo. Tienen un olor y un sabor fuertes, no son dulces pero sí sabrosas, por lo que conviene hervirlas antes de su consumo.

Éstas son algunas de sus propiedades:

• 1.-Alto contenido de nutrientes: El pequi es una fuente rica en vitamina A, vitamina C, hierro, calcio y potasio.
• 2.- Acción antiinflamatoria: La pulpa y la semilla del pequi contienen sustancias con propiedades antiinflamatorias, que pueden ayudar a reducir la inflamación y aliviar el dolor en enfermedades como la artritis. Es un alimento ideal para los deportistas de alta intensidad porque puede ayudar a prevenir lesiones.
• 3.- Protección cardiovascular: El pequi contiene es una fruta muy rica en ácidos monoinsaturados y antioxidantes que pueden ayudar a proteger contra enfermedades cardiovasculares, reduciendo el riesgo de enfermedades como la hipertensión y la enfermedad arterial coronaria. Además, sus ácidos monoinsaturados reducen el nivel de cadenas de aceite saturadas y bajan los niveles del colesterol "malo". Al ser rico en potasio, relaja los vasos sanguíneos, aumenta el flujo de sangre, lo que se traduce en una reducción de la presión arterial.
• 4.- Acción antiviral y antimicrobiana: Algunos estudios han demostrado que el pequi puede tener acción antiviral, especialmente contra el virus del herpes simplex tipo 1. Además, el aceite de pequi también tiene propiedades antimicrobianas, que pueden ayudar a combatir las infecciones causadas por bacterias y hongos.
• 5.- Beneficios para la piel: El aceite de esta fruta tiene propiedades hidratantes y antioxidantes, que pueden ayudar a proteger y nutrir la piel. También puede evitar la aparición de imperfecciones en la cara.
• 6.- Combate el estreñimiento. El consumo del pequi es muy beneficioso para el sistema digestivo ya que al ser un laxante natural, contribuye al buen funcionamiento del tracto intestinal y regula el metabolismo.
• 7.- Fortalece el pelo. El pequi previene la caída del cabello porque contiene tacoferol y vitamina A, lo que fortalece las raíces del pelo y le hace más resistente ante los agentes externos que puedan dañarlo.
• 8.- Mejora la visión: La vitamina A y los carotenoides del pequi actúan como antioxidantes, sobre todo en las células oculares.

  

Si no se ha consumido nunca, es recomendable hacerlo con precaución porque puede provocar algún tipo de alergia alimentaria. En el caso de tener algún efecto adverso o reacción es importante acudir a un médico para que nos dé un diagnóstico.

En el caso de utilizarlo para tratar de adelgazar, es importante que se lleve a cabo una dieta hipocalórica, equilibrada, beber al menos dos litros de agua y hacer deporte. En cuanto esto último, caminar es la forma más sencilla y económica de cumplir con la recomendación general que nos formula la OMS (Organización Mundial de la Salud) de realizar 150 minutos a la semana de un ejercicio aeróbico moderado.

Para adelgazar caminando hay que recorrer cada día al menos 15.000 pasos. La OMS señala que para estar sano debes caminar unos 10.000 pasos al día. Pues bien, a este mínimo hay que añadirle al menos 5.000 pasos más hasta llegar a los 15.000 pasos, o lo que es lo mismo unos 11 kilómetros. A partir de esta distancia, que se debe recorrer de forma enérgica, comenzará la pérdida de peso. Se puede combinar con deporte de alta intensidad o de fuerza para fortalecer los músculos, lo que hace que el organismo necesite quemar más calorías y por lo tanto acelera el metabolismo.

En el caso de que se lleven a cabo estas recomendaciones y no se logre adelgazar, sería recomendable recurrir a un especialista en nutrición para que nos realice un estudio y determine cuáles son los alimentos idóneos para nosotros y cuáles debemos evitar si queremos lograr nuestros objetivos.