Los nueve efectos secundarios de la aspirina: del dolor de estómago al zumbido de oído

La aspirina es un medicamento antiinflamatorio no esteroideo (AINE) ampliamente utilizado para tratar dolor, fiebre y dolor articular. Aunque es generalmente seguro y efectivo, también puede tener efectos secundarios significativos.

• Problemas gastrointestinales: La aspirina puede causar irritación en el revestimiento del estómago, lo que puede provocar síntomas como dolor abdominal, indigestión, náuseas, vómitos o sangrado gástrico.
• Problemas hepáticos y renales: La aspirina puede aumentar los niveles de enzimas hepáticas y renales, lo que puede indicar daño en estos órganos.
• Reacciones alérgicas: Algunas personas pueden tener reacciones alérgicas a la aspirina, incluyendo urticaria, dificultad para respirar, hinchazón de la cara, labios o lengua.
• Problemas de sangrado: La aspirina puede aumentar el riesgo de sangrado debido a su acción sobre el revestimiento del estómago y la capacidad de reducir la coagulación sanguínea.
• Problemas en el oído: La aspirina puede causar tinnitus o zumbidos en los oídos, especialmente en personas mayores.
• Problemas de la piel: Algunas personas pueden desarrollar erupciones cutáneas o hives mientras toman aspirina.
• Problemas respiratorios: La aspirina puede causar broncoespasmo o hinchazón de las vías respiratorias en personas con asma.
• Problemas de visión: La aspirina puede causar cambios temporales en la visión, especialmente en personas mayores.
• Interacciones con otros medicamentos: La aspirina puede interactuar con otros medicamentos, incluyendo anticoagulantes, antidepresivos, medicamentos para la diabetes y otros AINE.

Es importante que hables con tu médico antes de tomar aspirina, especialmente si tienes algún problema de salud o estás tomando otros medicamentos. Tu médico puede ayudarte a determinar si la aspirina es adecuada para ti y cómo minimizar el riesgo de efectos secundarios.

En resumen, la aspirina es un medicamento eficaz para tratar dolor y fiebre, pero también puede tener efectos secundarios significativos, como problemas gastrointestinales, hepáticos y renales, reacciones alérgicas, problemas de sangrado, problemas de oído y de piel.