El santoral, también conocido como calendario litúrgico, es un libro religioso que contiene la lista de los santos reconocidos por la Iglesia Católica y que se celebra cada día del año. Más allá de una simple lista de nombres, el santoral representa un viaje fascinante a través de la fe, la historia y la cultura cristiana.

¿Qué santos se celebran hoy, domingo 10 de noviembre?

• San León Magno (Papa y Doctor de la Iglesia): Fue papa desde el 440 hasta su muerte en 461. Es conocido por su contribución a la consolidación de la doctrina cristiana y por su defensa de la autoridad papal.
• San Martín de Tours (Obispo): Nacido en el 316, San Martín es uno de los santos más venerados de la Iglesia católica. Fue obispo de Tours y es famoso por su humildad y sus milagros, así como por su amor hacia los pobres.
• Santa Gertrudis la Grande (Monja benedictina): Nació en 1256 y fue una mística alemana conocida por sus visiones espirituales y su profunda devoción.

San Andrés Avelino: Vida y pontificado

San Andrés Avelino nació en 1521 en Castronuovo, en la región de Basilicata, Italia. Desde joven, mostró una gran vocación religiosa y se unió a la Orden de los Clérigos Regulares de la Madre de Dios, conocida como los Avelinos, fundada por él mismo. Su vida estuvo marcada por un profundo compromiso con la espiritualidad y la educación religiosa. San Andrés se dedicó a la formación de jóvenes y a la dirección espiritual, buscando que su congregación viviera según los principios de humildad, piedad y dedicación al servicio de Dios.

Aunque no fue pontífice, fue un hombre de gran influencia dentro de la iglesia en su época, ya que su labor como fundador de una nueva congregación le dio un papel importante en la vida religiosa de la Italia del siglo XVI.

Canonización y legado

San Andrés Avelino fue beatificado en 1745 por el papa Benedicto XIV y canonizado el 12 de octubre de 1767 por el papa Clemente XIII. Su legado está vinculado principalmente a la creación de la Orden de los Clérigos Regulares de la Madre de Dios, que continuó con su trabajo educativo y pastoral en diferentes regiones de Italia. La obra de San Andrés Avelino dejó una huella importante en la Iglesia, ya que su congregación se expandió y se dedicó a la formación moral y religiosa de los fieles. Además, su devoción y enseñanza siguen siendo ejemplos de humildad y sacrificio para la vida cristiana.

Exilio y muerte

San Andrés Avelino vivió sus últimos años en un estado de exilio debido a las tensiones políticas y religiosas de la época. Durante sus últimos días, se refugió en la ciudad de Naples, donde falleció el 10 de noviembre de 1608, a la edad de 87 años. Su muerte fue un momento de gran tristeza para la comunidad que había formado, pero su legado perduró a través de su obra y el crecimiento de su orden.

San Andrés Avelino fue venerado como un modelo de vida cristiana, destacando por su dedicación a la educación y la formación de una iglesia más cercana a los fieles. Su festividad se celebra el 10 de noviembre.