Cuartel emocional

Inimaginable

Mentir es el sistema de gobierno de este tiempo que nos ha tocado vivir

Quien más y quien menos tiene sus fantasías y las imagina por ver si, haciendo fuerza y empujando con toda nuestra energía, pudiéramos lograr que se hicieran realidad. Unas serían posibles, otras imposibles y otras inimaginables. Así es como el panorama se nos plantea: inimaginable que el imputado fiscal general del Estado con los mensajes de su móvil borrados acabe en la cárcel, aunque sobran motivos para ello; inimaginable que el que fuera mano derecha de Sánchez, el tal Ábalos con toda su cuadrilla (los Koldos, los Aldamas), acaben también entre rejas; inimaginable que la imputada mujer del presidente la veamos también en el trullo por los delitos que se le atribuyen de tráfico de influencias, prevaricación, cohecho, apropiación indebida etc.; que el imputado hermanito “artista” del jefe del gobierno, el tal David, con un puesto a su medida en la Administración de la región de Extremadura también debería estar a la sombra pero también es inimaginable que vaya a suceder; las sucias mentiras de Sánchez y los suyos deberían provocar no sólo su dimisión sino su salida de Moncloa con las manos esposadas, pero eso, amigos míos, es del todo inimaginable. Lo digo con dolor porque es triste decepcionaros, más aún en vísperas de Nochebuena, cuando ya todos tenemos la mesa puesta con los más bonitos adornos que hemos encontrado, esos manteles de tartán y esos platos con los cascanueces pintados, esos coloridos muñecos que simbolizan la magia, los sueños y la esperanza, y que protegen nuestros hogares -algo tan adorado por cada uno de nosotros, tan inviolable, nuestra isla privada-, de los malos espíritus atrayendo la buena suerte y otorgándonos fortaleza.

Mentir es el sistema de gobierno de este tiempo que nos ha tocado vivir. No es un titular que nos sorprenda, por ejemplo, el que dice que “Reyes Maroto mintió cuando dijo que no había tenido contacto con Aldama”, porque ya se sabe que el embuste es la norma. No nos choca que Tezanos, ese sirviente, ese criado para todo de Sánchez, saque la última encuesta del CIS diciendo que hoy el PSOE sería el ganador en unas elecciones, porque simulan que ningún escándalo baja a los socialistas de esa primera posición de la que actualmente disfrutan. No nos sorprende, en definitiva, que no pase nada, porque nunca pasa nada, pase lo que pase, y si pasa, no importa, y si una autoridad del Estado como lo es el que ostenta la Fiscalía General comete un delito –cosa insólita aquí y en Cafarnaún-, y elimina las pruebas, seguimos tomando nuestra cervecita y leyendo el Marca porque a la gente ya nada puede sorprenderle por muy fuertes que sean los hechos y sus protagonistas.

En estas que dicen que Feijóo trabaja ya con la hipótesis de un adelanto electoral para el año que comienza en apenas una semana. De ilusiones también se vive pero mucho me tengo que equivocar si pienso que los comicios no los veremos hasta dentro de dos años, lo mismo que no veremos en Alcatraz a los recitados más arriba. Ni a Bildu, ni al PNV, ni a Junts, ni a Esquerra, ni a Podemos ni a Sumar les va a ir mejor que con éste pájaro, así que sentémonos con tranquilidad y disfrutemos de lo navideño.

CODA. “El mundo que yo conocía está desapareciendo”, es una frase leída a una entrevista con el muy querido José Luis Garci, quien tan felices nos hizo con su cine, ese que hoy aquí ya no se hace, sólo se politiza, pero me apunto a sus palabras pronunciadas citando la fuente para no plagiar, e iría a un grado más diciendo “el mundo que yo conocía ha desaparecido”.