Huelga de estibadores
Es imprescindible estibar en el Congreso
Mariano Rajoy es muy consciente de que está en minoría en el Congreso. Lo supo desde su investidura, porque hasta ese día intentó, sin éxito, una gran coalición que garantizara la estabilidad y una gestión eficaz alejada del populismo y de políticas partidistas. Rajoy sabe que no tiene mayoría suficiente, por eso el diálogo y la negociación es permanente con la oposición, intentando llegar a acuerdos. Algunos políticos, tras rechazar una medida imprescindible, proclamaban que por fin el gobierno se ha dado cuenta de que está en minoría, cuando fueron ellos los que actuaron como si el gobierno tuviera el apoyo de la mayoría de la Cámara como para ganar la votación que evitara los efectos negativos para los ciudadanos.
De los tres partidos de la oposición con mayor representación en el Congreso nada cabe esperar de Podemos, pero sí del PSOE y de Cs, que deberían votar pensando más en no perjudicar a la gente que en obtener pírricas victorias sobre el gobierno, como han hecho rechazando un Real Decreto Ley que cumplía lo exigido en una sentencia del Tribunal Europeo de Justicia, la cual obliga a cambiar el modelo de la estiba en España para que deje de ser un monopolio y haya libertad para contratar a los trabajadores. La multa que tendremos que pagar por no derogar el ilegal sistema actual es de más de cuatro millones de euros mensuales. La retribución de los estibadores es más alta que la de la mayoría de los trabajadores y es lógico por tanto que se movilicen para intentar mantener la situación actual. Lo inadmisible es que haya políticos que jueguen con asuntos tan delicados como éste, que llevan al desprestigio de España por negarse a cumplir la normativa europea, que exige acabar con la falta de libertad en la contratación. Los socialistas han votado en contra y Cs se ha abstenido, sin que hubieran manifestado su interés por modificar el contenido del Decreto Ley, cuyo borrador les fue entregado antes de ser aprobado por el gobierno. El ministro de Fomento ha cumplido con lo dispuesto por la UE, también lo ha hecho con los estibadores y las empresas, buscando las mejores condiciones para los trabajadores en un periodo transitorio. Los grupos parlamentarios han tenido toda la información, y algunos como el PNV han votado con sensatez. El PSOE y Cs parece que no se han enterado de que votar demagógicamente en contra del interés general tiene graves consecuencias.
Es imprescindible la estiba en el Congreso para distribuir la carga, porque no se puede mantener el rumbo si la responsabilidad recae solo en Rajoy y en el PP. Como saben los estibadores, si la carga va solo en un lado la nave se hundirá, como le puede pasar a esta legislatura si la oposición no asume una parte de la carga necesaria para llevar a España a buen puerto.
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