La fuga de 60 inmigrantes en cuarentena evidencia la falta de seguridad y vigilancia

«La nueva fuga de inmigrantes del pabellón de Cabezo Beaza corrobora que los medios para garantizar la cuarentena son insuficientes». Así de crítica se pronunció ayer la vicealcaldesa de Cartagena, Noelia Arroyo, tras conocer que 59 inmigrantes en cuarentena habían escapado de la vigilancia de la Delegación del Gobierno, cuya custodia y responsabilidad compete. Incluso, pese a contar con el apoyo de seguridad privada contratada por el Gobierno regional.

«A pesar de que el delegado del Gobierno, José Vélez, sigue asegurando que todo está bajo control y que la coordinación es total, la realidad es que la cuarentena no se está cumpliendo porque, debido a su incapacidad para pedir ayuda y disponer de más medios, las fugas de personas que podrían estar contagiadas de Covid se suceden. Es un irresponsable porque sigue afirmando que está todo previsto mientras siguen habiendo fugas y llegando nuevas pateras».

Unas declaraciones que dijo, precisamente, después de que en la misma madrugada del viernes se interceptaran otras cuatro pateras con 26 inmigrantes a bordo, de los cuales, según el Servicio de Epidemiología, cuatro arrojaron un resultado positivo de coronavirus.

«El delegado sigue apostando por confinarlos en Escombreras y reitera que todo está bajo control. Sabemos que Policía Nacional y Guardia Civil están desbordados por falta de efectivos. No lo decimos nosotros, lo han denunciado ellos públicamente», destacó Arroyo.

Según la propia Delegación del Gobierno, de los fugados ya se había logrado localizar a 15 de ellos, por lo que durante la jornada de ayer la búsqueda se ciñó a 44. Además, la semana pasada, un centenar de los migrantes que se encontraban en las instalaciones provisionales de Cruz Roja en la dársena de Escombreras protagonizaron otra fuga, aunque, en ese momento, se localizaron prácticamente a todos.

«La situación es muy grave porque lo que está en riesgo es la salud de los propios fugados, así como la de los miembros de los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado, de la Policía Local que se ve obligada a actuar por responsabilidad y la de los voluntarios que colaboran en el operativo», enfatizó Arroyo.

Finalmente, ofreció toda la colaboración del Ayuntamiento de Cartagena para poder acoger y custodiar a los inmigrantes, y criticó que dirigentes de otros municipios afines al Gobierno central como Mazarrón o Torre Pacheco se hayan negado. «¿Qué van a hacer a partir de ahora? ¿A dónde los van a llevar? De momento, Cartagena es el único que ha ofrecido ayuda. Esto es insostenible».