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Geotermia

La transición energética europea pone la mirada en la geotermia

Un informe reciente sobre esta energía renovable apunta a un potencial a futuro imprescindible en el continente europeo

La transición energética europea pone la mirada en la geotermia
La transición energética europea pone la mirada en la geotermiaUnsplash - Berndt Dittrich

El último estudio de ETIP Geothermal (European Technology & Innovation Platform on Geothermal), Horizontes geotérmicos: De las ciudades a las regiones, recoge el estado actual de la energía geotérmica en Europa, así como las previsiones y el papel de este recurso en la transición a un mundo más verde.

Se trata de un tipo de energía que se almacena en forma de calor bajo la superficie de la tierra sólida, con muchas garantías y un importante ahorro energético. Es limpia, renovable e inagotable y muy fácil de gestionar, por lo que muchos gobiernos a nuestro alrededor ya están apoyando plenamente por ella.

Y es que hoy en día, la geotermia ya es responsable de la calefacción y refrigeración de más de 16 millones de personas en Europa y es particularmente popular en países como Francia, Alemania, Italia o Hungría.

De acuerdo con el informe, hay más de 2 millones de bombas de calor geotérmicas instaladas en nuestro continente; en su mayoría son unidades pequeñas situadas en viviendas familiares, que cuentan con unos 10kW de potencia y ofrecen calor, frío y agua caliente.

Pensando en el futuro

La previsión es que cada vez se vayan implementando sistemas más grandes hasta llegar a 1MWth, en instalaciones de edificios residenciales o industriales y terciarios, gracias a la innovación y a los nuevos modelos empresariales.

En esta nueva fase de la energía geotérmica, se espera que en los próximos se pongan en marcha más de 30 centrales que se añadirán a las 150 que ya existen de generación eléctrica en nuestro continente, y que ya proporcionan electricidad a más de 11 millones de personas.

Todo esto se alinea perfectamente con las principales hojas de ruta que tenemos para la próxima década y que apuntan a la necesidad de apostar por recursos que permitan reducir la independencia de los combustibles fósiles.

La geotermia, en ese sentido, llegaría a representar más del 10% del consumo de energía en Europa para 2040 y seguiría a pleno rendimiento gracias a que es una energía renovable, muy competitiva y que ofrece unas elevadas seguridad y flexibilidad.

En nuestro país, sin embargo, aún se trata de un recurso más o menos desconocido. Algunas comunidades como Cataluña o Canarias ya se han sumado a esta energía limpia, aunque las cifras de penetración de este recurso dejan claro que aún queda mucho camino por recorrer.