Gastronomía
Feliz (y sabroso) Día del Padre: los mejores restaurante de Madrid para celebrarlo
Recopilamos restaurantes de la capital que se suman a la celebración
Madre no hay más que una, pero también debería concedérsele a los papis tan espléndida y amorosa unicidad. El próximo 19 de marzo (con puente de regalo que nos trae el calendario) se celebra el Día del Padre, así que este humilde escribiente les trae ideas de regalo gastronómicas para agasajar a su hacedor de la manera más pura y acertada que puede uno concebir: con buena comida y bebida. Deje la corbata, no torture con los calcetines de hilo de Escocia, olvide la sempiterna caja de pañuelos de tela: con esto se acierta sí o sí y puede implicar a toda la unidad familiar (y a la extensión política, si se portan bien).
En el apartado de regalos físicos, hay varias marcas que se han puesto las pilas de cara al día de San José. Una de ellas es Finca La Torre, excelso aceite malagueño dotado con reconocidos premios. Su colección One reúne dos de sus monovarietales, One Organic Hojiblanca y One Organic Arbequina, elaborados con una selección de las mejores aceitunas recogidas durante el primer día de cosecha, antes del envero, cuando la oliva aún está verde y da un zumo más frutado, verde y fresco. Ambos AOVES pueden adquirirse en botellas de medio litro por un poco más de 20 euros en su web y en tiendas especializadas. Una curiosidad: las botellas de vidrio están bañadas con una protección ultravioleta diseñada para mantener intactas las propiedades de este oro líquido.
Si el padre en cuestión tiene gusto por el buen vino, José Moro y su bodega boutique Cepa 21 rinden homenaje a los progenitores más sibaritas con dos estuches con una selección de sus grandes vinos. El pack Premium (Cepa 21, Malabrigo y Horcajo, por 145,65 €) y Soñando en Vino (Cepa 21, Hito y Malabrigo, por 70 €) están compuestos cada uno por tres botellas de 75 cl, que concentran el inigualable terroir de la Ribera del Suero y la reinterpretación arriesgada e innovadora que hace esta bodega de su histórica herencia.
Si queremos saborear los placeres de la buena mesa, no son pocos los restaurantes que van a preparar platos especiales. Es el caso de Ozio, ese italiano ‘bien’ del norte de Madrid, en la zona de Tetuán donde las calles tienen nombres de generales y abundan los espacios recomendables como este, con pizzas excelentes y una interesantísima selección de cremosos arancinis. Harán un postre típico de San José en Sicilia, un buñuelo frito relleno de requesón, el llamado sfinge de San Giuseppe...Si quieren elevar el nivel, Ignazio Deias no defrauda a los entusiastas de la alta cocina italiana con una bodega exquisita, protagonizada por los grandes productores transalpinos y ciertas rarezas, algunas de ellas adquiridas en subastas por este curioso sardo.
Otro sitio muy del gusto de los padres, sobre todo para los de gusto clásico, es Hevia, con sus callos, su tortilla, sus croquetas, sus ostras y su arsenal de productazo de calidad servido por caballeros para caballeros. Para ir con niños y chavales, a buen precio e ideal para grupos, tenemos el nuevo Casa Vito, un italiano divertido e informal del grupo Vespok, con pastas y pizzas y ambiente de noctambuleo si los jóvenes de edad, o los de corazón, quieren tomarse una copita o arrancarse en sus sesiones de piano bar. Y como este fin de semana va a hacer bueno, no es mala idea salir a la sierra, fingir que se hace deporte con un breve paseo y darse un homenaje cárnico en el curioso horno circular de Víctor: no se pierdan los torreznos ni los postres.
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