Sucesos

Ecologistas madrileños trasladan su apoyo a las víctimas de agresión sexual de un fundador de Ecologistas en Acción

"Tenemos la esperanza de que estos hechos no se cierren en falso" afirman desde las cinco organizaciones regionales

El activista Santiago Martín Barajas abandona Ecologistas mientras se "aclara" su presunta agresión sexual
El activista Santiago Martín Barajas abandona Ecologistas mientras se "aclara" su presunta agresión sexualEuropa Press

Los colectivos ARBA, Asociación Ecologista del Jarama El Soto, GRAMA, Jarama Vivo y Liberum Natura han trasladado su apoyo a las víctimas de agresión sexual tras los últimos casos que han salido a la luz y han pedido que se avance en democracia y transparencia en el movimiento.

Así lo han trasladado en un comunicado conjunto, después de que Ecologistas en Acción haya abierto una investigación interna al activista Santiago Martín Barajas tras haber sido denunciado por una presunta agresión sexual. Según señalaron fuentes de la organización a Europa Press, Ecologistas en Acción nunca había recibido la denuncia contra Martín Barajas, además de indicar que iniciaron los protocolos de acoso y justicia restaurativa, pero que, de momento, no ha sido apartado.

Los ecologistas madrileños han expresado su "más absoluto rechazo" a este tipo de conductas, dentro y fuera del movimiento, y han afirmado que es "inadmisible" que en el seno del movimiento ecologista se dé cualquier tipo de violencia sexual.

"El ecologismo significa el cuidado y la defensa de la naturaleza (en la que se incluyen los seres humanos) y, por tanto, personas que, aprovechando su situación de poder y fuerza, agreden a mujeres no pueden ser consideradas ecologistas ni pertenecer a dicho movimiento", han criticado, además de subrayar que es necesario hacer una reflexión sobre qué está ocurriendo en el seno de organizaciones ecologistas y de izquierdas que se consideran feministas.

Por ello, consideran "necesario" avanzar en mecanismos de democracia y transparencia interna que impidan situaciones de poder que sean utilizadas por determinadas personas para ejercer acoso, abusos y agresiones, "favoreciendo entornos seguros para que cualquier violencia sexual no quede silenciada y oculta".

"Tenemos la esperanza que estos hechos no se cierren en falso y sirvan para que en el futuro no se tenga que lamentar ningún otro caso de violencia sexual en el seno del movimiento ecologista. Si nos tocáis a una, nos tocáis a todas. Basta ya", han añadido.