Historias humanas
Así salvó Cáritas a Begoña: "Estaba sin casa, trabajo ni familia"
Desde la organización parroquial avisan de que ha crecido la carencia material severa en la capital
Tras la pandemia, como muchas otras personas, María Begoña se quedó sola, desahuciada, sin ahorros y sin trabajo. Estadísticamente comenzó a pertenecer al colectivo «en riesgo de exclusión social». Esta mañana, en una de las sedes de Cáritas en Madrid, ella misma revivía su historia: «Sin Cáritas no sé que habría sido de mí. Estaba sin recursos y sin fuerzas y se me pasaban las peores ideas por la cabeza. Ellos me dieron alimentos, ropa y fuerzas. También me han ayudado a reinsertarme en el mercado laboral, a mis 62 años».
Ahora, encadena varios trabajos temporales y asegura haber reconducido su vida: «A mi edad, ya pensaba que iba a ser imposible encontrar un trabajo, pero gracias a Cáritas he podido progresar y salir del pozo en el que estaba. Me siento con más fuerzas que nunca». María Begoña es una de las numerosas víctimas de la pandemia. Nunca había imaginado acabar en una situación así: «Yo trabajaba realizando encuestas, con una vida normal. Pero, cuando me quedé sin ahorros y me desahuciaron, toqué fondo. Pero ahora quiero compartir mi testimonio para demostrar que sí se puede salir de ahí, con ayuda». Así, alienta a todos los ciudadanos a seguir ayudando y comprometiéndose con causas solidarias.
Desde Cáritas, hoy anunciaban los últimos datos de pobreza en Madrid y compartían el impacto social de su actividad en los últimos meses: «Observamos que, pese a que hay una mejora económica en Madrid, la situación de las familias vulnerables sigue siendo crítica». Tal y como aseveran, ha aumentado el número de personas que se encuentra en situación de carencia material severa: el 19,4% no puede permitirse mantener la vivienda con una temperatura adecuada (un 32 % más que en 2022); el 34 % no tiene capacidad para afrontar gastos imprevistos (un 8,6 % más con respecto a 2022); y el 12,5 % ha tenido retrasos en el pago de gastos relacionados con la vivienda principal (hipoteca o alquiler, recibos de gas, comunidad...) en los últimos 12 meses, lo que significa un 22,5 % más con respecto al año anterior.
«En este aumento de la brecha de la desigualdad en Madrid influyen la inflación, la subida de los precios de la vivienda y las dificultades para acceder a un empleo digno», explicaba esta mañana el director de Cáritas Madrid, Luis Hernández Vozmediano. Resumía así las razones de la situación de exclusión en la que se encuentran muchas de las personas que se acercan a Cáritas Madrid. La subida de precios acumulada en los últimos años perjudica más a las familias con menos recursos. También el encarecimiento de la vivienda, en concreto el precio de los alquileres que ha subido un 11,9 % en el último año y que obliga a muchas familias a vivir en habitaciones alquiladas. El acceso al empleo sigue siendo otra preocupación prioritaria, sobre todo para los jóvenes y para quienes llegan de fuera o están en situación administrativa irregular.