Casi 20.000 árboles más por la línea 11 de Metro

Llevar a cabo una obra de ampliación de Metro de la envergadura de la Línea Diagonal, como se llama ya la Línea 11 de Metro, tiene un impacto ambiental considerable en lo que afecta al arbolado. Su ejecución abre nuevas vías de conexión en la capital, pero también reporta un aumento de la masa arbórea en compensación por todos los ejemplares que han tenido que desaparecer para acometer las obras.

La Dirección General de Infraestructuras ha tratado de reducir al máximo el número de ejemplares que tendrán que ser talados. De hecho, se preservarán 58 árboles, que serán protegidos mediante tablones de madera, se trasplantarán 348, pero habrá que talar 1.027.

En consecuencia, la Comunidad de Madrid pondrá a disposición del Ayuntamiento de Madrid 19.513 nuevos árboles para plantarlos en la capital por los trabajos de la ampliación que se efectuarán en el tramo comprendido entre Plaza Elíptica y Conde de Casal, según ha informado la Consejería de Transportes e Infraestructuras. ¿Pero por qué ese número de árboles y no otro? «Para calcular los datos de compensación se ha tenido en cuenta lo que establece Ley 8/2005, de 26 de diciembre, de protección y fomento del arbolado urbano de la Comunidad de Madrid. Después del estudio exhaustivo de los 1.027 árboles afectados se ha determinado, a efectos de cálculo de reposición, una edad media de los mismos de 19 años, lo cual supone la reposición y puesta a disposición de la Administración municipal de un total de 19.513 árboles como medida de compensación», explican desde la Consejería.

«Todas estas actuaciones serán llevadas a cabo con la autorización de la entidad competente en esta materia, que es la Dirección General del Agua y Zonas verdes dependiente del Área de Gobierno de Medioambiente y Movilidad del Ayuntamiento de Madrid», puntualiza el consejero de Transportes e Infraestructuras, David Pérez. Entre otras cosas porque «para la Comunidad de Madrid uno de los pilares esenciales es proteger el medio ambiente ya que es un elemento esencial y fundamental para la calidad de vida de los ciudadanos».

De momento, el Ejecutivo autonómico ya ha comenzado las obras de prolongación que conecta a su vez con la línea 6 del suburbano, una medida que beneficiará a los barrios de Carabanchel, Usera, Arganzuela y Retiro, ya que dispondrá de nuevas conexiones con la red del suburbano madrileño. De hecho, el Consejo de Gobierno aprobó ayer la adjudicación del contrato de apoyo técnico, complementario al de dirección de las obras, coordinación de seguridad y salud en la prolongación de la línea 11 de Metro en el tramo comprendido entre la Plaza Elíptica y Conde de Casal, tal y como detalló el vicepresidente del Ejecutivo autonómico, Enrique Ossorio. Actualmente, la línea 11 circula entre las estaciones de La Fortuna y Plaza Elíptica pero, con los trabajos que se han empezado a ejecutar, se ampliará en siete kilómetros la red de Metro con dos nuevas estaciones: Comillas y Madrid Río. Ambas estaciones contarán con escaleras fijas y móviles, además de ascensores para cumplir con la normativa de accesibilidad y movilidad.

La inversión prevista es de 500 millones de euros, con un plazo de ejecución de tres años y medio y se pretende que los trabajos sirvan para reducir la huella de carbono.

La Línea Diagonal recorrerá 33,5 kilómetros y conectará con 11 de las 12 líneas del suburbano y el sur con el norte de la capital. Además de las nuevas estaciones de Comillas y Madrid Río, se construirán otras tres de interconexión en líneas existentes: Palos de la Frontera con L3; Atocha con L1, Cercanías y AVE; y la mencionada Conde de Casal con L6. En esta última, además, está prevista la futura construcción de un nuevo intercambiador de transportes que dará servicio al corredor de la autovía A3 para unir el sur con el este de la capital.

La previsión es que el número de usuarios diarios de esta línea se triplicará, pasando de 25.000 a 75.000, lo que contribuirá a descargar la L6, según las estimaciones de la Consejería. Además, las estaciones de Palos de la Frontera, Atocha y Conde de Casal serán reformadas cumpliendo para que sean totalmente accesibles.

«Esta nueva prolongación conectará directamente a los vecinos del distrito de Carabanchel de una manera más eficaz con la red de Metro. La mayor parte de los usuarios de esta prolongación ellos procederán del entorno de las estaciones de Palos de la Frontera, Madrid Río y Conde de Casal. Asimismo, está previsto que los del barrio de Comillas sumen cerca de 9.000 viajeros al día en el año horizonte (2035)», ha manifestado Pérez.

El proyecto, concluido en 2027

La nueva Diagonal de Madrid ha sido concebida para favorecer la descentralización de la movilidad en Madrid de tal manera que se convierta en una alternativa de transporte público que evite el paso obligado por las áreas centrales de Madrid. También se ha diseñado pensando en una mejora de la conexión de barrios como el PAU de Carabanchel o los nuevos desarrollos de Valdebebas, con una alternativa más directa y con menor número de transbordos.

El proyecto, que estará concluido en 2027 en su totalidad, también contempla que la nueva línea sirva para descargar otras, como la 6 y la 10, al facilitar intercambios con el mayor número posible de líneas de Metro y generar rutas alternativas y más directas para los viajeros.

La nueva Línea Diagonal de Madrid está prevista que se haga por fases y que integre las ampliaciones ya previstas de la línea 11 de Metro, de Plaza Elíptica al futuro intercambiador de Conde de Casal y la llegada del Metro a los nuevos desarrollos de Valdebebas. Así, en el tramo el sur, la línea se extenderá desde su extremo actual en La Fortuna hasta Cuatro Vientos (con conexión con Cercanías y línea 10 de Metro), y se completará la ampliación de Plaza Elíptica a Conde de Casal. En total, se trataría de 18,3 kilómetros que incluyen las dos nuevas estaciones de Comillas y Madrid Río, la conexión con Atocha Renfe y un gran intercambiador en Conde de Casal para todo el corredor de la A-3, según explicó en su día la Consejería de Transportes.

El tramo central unirá Conde de Casal con Mar de Cristal, con conexión prevista en las estaciones de Vinateros, La Elipa, Pueblo Nuevo y Arturo Soria. Además, se estudiarán posibles nuevas paradas intermedias. En total, 8 kilómetros de longitud y conexiones con las líneas 2, 4, 5, 7, 8, 9 de Metro.

Por último, el tramo norte, de 7,2 kilómetros, unirá Mar de Cristal con la nueva estación de Ciudad de la Justicia (que actuará como intercambiador con la estación de Cercanías de Valdebebas), con la de Aeropuerto T-4 y con una nueva estación en la zona norte de Valdebebas. Este tramo garantiza la llegada de Metro a los nuevos desarrollos de la zona nordeste de Madrid con infraestructuras clave como el nuevo hospital Isabel Zendal o la futura Ciudad de la Justicia.