La vicepresidenta del Consell, Mónica Oltra, está más que satisfecha con la gestión de los recursos que se hace desde la Generalitat. Ayer presumió de pagar a 66 días a los proveedores a pesar de que el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, no envía Fondo de Liquidez Autonómica (FLA) como hizo el año pasado con el Gobierno de Fabra. La portavoz incidió en que el anterior Gobierno pagaba a 90 días sin tener en cuenta que su plazo de pago también incumple la ley estatal, que marca que la demora no supere los 30 días.

Oltra aseguró que el Consell no sabe cuándo tiene previsto Montoro enviar un nuevo FLA, ingreso que depende de la aprobación del plan de ajustes.

En este contexto de apuros económicos, el pleno del Gobierno valenciano aprobó ayer cuatro líneas presupuestarias para atender los vencimientos de deuda de Feria Valencia, derivados de convenios suscritos entre 2002 y 2007, y que suman 32 millones euros. Estas partidas se detraerán de subvenciones previstas para el recinto ferial y no comportan un incremento del presupuesto.

El Consell también acordó ayer la liquidación definitiva del plan de inversiones productivas de 2009, cuantificado en 1.020 millones y que «provocó la quiebra de cientos de empresas por impago». Oltra explicó que se dará la oportunidad a los Ayuntamientos de «reorientar» los proyectos pendientes.

Aseguró que el hecho de que siete años después de su aprobación queden actuaciones incluso por iniciar, refleja la falta de control de un plan nacido de la época en que «se ataban los perros con longanizas». Como ejemplo, puso el de la construcción de una biblioteca en Aspe, «no en Nueva York», de 4.000 metros cuadrados, del que a día hoy únicamente se puede ver el armazón. «¿Es que en Aspe son los más lectores del mundo?», ironizó.

En otro orden de cosas, el Gobierno valenciano ratificó el acuerdo firmado con las organizaciones sindicales que fija la duración de los nombramientos del personal interino docente a partir del curso 2015-2016. Así, los nombramientos para puestos vacantes efectuados hasta el 31 de diciembre se extenderán hasta el 31 de agosto, salvo que con anterioridad se produzca la incorporación del titular.

De esta manera, los profesores que realizan sustituciones cobrarán los meses de verano, algo que no ocurría en el último curso escolar, cuando no cobraban tras finalizar las clases.