El alcalde de Valencia, Joan Ribó, ha revelado hoy que la Empresa Municipal de Transporte (EMT) prepara una demanda judicial contra Caixabank por la estafa perpetrada por un grupo de ciberdelincuentes contra la empresa pública.

“La EMT ha puesto en marcha una demanda judicial al banco. Es un procedimiento complicado que necesita especialistas en derecho financiero”, ha dicho el primer edil durante su intervención en el pleno del Ayuntamiento.

Ayer, sin embargo, era la entidad bancaria la que amenazaba al consistorio con “tutelar judicialmente” la reputación de la compañía si este no cesaba “de manera inmediata y definitiva” de utilizar su nombre para asociarla al pufo millonario.

Hoy Ribó insistía en culpar a Caixabank y a la empleada despedida del fraude y en librar de cualquier responsabilidad al presidente de la EMT y concejal de Movilidad, Giuseppe Grezzi.

Sobre el papel que ejerció la ex jefa de Administración de la EMT, Celia Zafra, (ahora despedida), el alcalde ha lamentado que esta facilitara ocho transferencias a un banco de Hong Kong (China), “un paraíso fiscal”, y que “no sospechara” ni “cuestionara” las mismas “obviando” a otros trabajadores y “extralimitándose” en sus funciones.

Ha insistido en cuestionar el hecho de que la entidad bancaria que realizó las transferencias, en referencia a Caixabank, tampoco pusiera en marcha los protocolos de seguridad al dirigirse a un paraíso fiscal.

En cuanto a Grezzi, el alcalde mantiene su apoyo y se niega a cesarle en el cargo. Para el grupo municipal popular, la tibieza de la defensa que ha hecho Ribó de su concejal de Movilidad desde que estallara el escándalo ha llevado al italiano a plantearse su paso al grupo mixto, según la portavoz popular, María José Catalá.

Con todo, la única buena noticia que celebra hoy el gobierno local es el bloqueo, gracias a las actuaciones de la Interpol y de un gabinete de abogados, de cerca de 150.000 euros en una cuenta en un banco de Hong Kong.

“Aunque la cantidad no es muy grande sí es “significativa”, y demuestra que el trabajo del consistorio está destinado a “conseguir retornar el dinero que nos han robado”, ha señalado el primer edil.

Sobre el resto de la cantidad defraudada, que asciende a cuatro millones de euros, ha manifestado que el “cuánto y el cuándo” se va a poder recuperar no lo pueden avanzar.

El alcalde también ha anunciado que la EMT realizará una auditoría externa para analizar el sistema de los pagos anteriores y actuales, y estudiará mejoras en el mismo.