El PSPV baraja la posibilidad de relevar a Torres como síndico en Corts

El estado natural del PSPV desde que perdió gobierno en la Comunitat Valenciana en 1995 sería, en palabras del escritor dominicano Manuel Matos, de «mudanza y acarreo».

El estado de crisis permanente de la formación hace que unos líderes sucedan a otros (mudanza) sin una solución de continuidad ya que el que llega cambia y denosta todo lo que había hecho su antecesor (acarreo). Romero, Pla, Alarte, Puig...., aderezados con varias gestoras de por medio.

En esta ocasión no es por una cuestión de liderazgo, sino antes bien todo lo contrario, pero el PSPV está planteándose muy seriamente sustituir a Antonio Torres al frente de la portavocía del grupo socialista en Les Corts Valencianes.

Torres, aquietado parlamentario, sobrado de educación, no ejerce la oposición más virulenta que los socialistas creen ahora necesaria para encarar el periodo preelectoral más halagüeño que han tenido en los últimos veinte años.

Su reciente convalecencia de una complicada operación hizo que le tomara el relevo Rafael Rubio, acerado parlamentario ducho en el cuerpo a cuerpo por su experiencia en el Ayuntamiento de Valencia contra, ni más ni menos, Rita Barberá.

Su verbo mordaz dejó en evidencia el parlamentarismo más sereno de Torres.

La proximidad de las elecciones europeas supone la posibilidad de darle a Torres un merecido descanso, y no porque vaya a bregar el parlamentario en el foro de Bruselas, sino porque la previsible salida hacia Bélgica del vicepresidente del Parlamento, Ángel Luna, deja una plaza libre en la Mesa de Les Corts, el retiro más dorado para aquellos a los que se les quiere dar la «patada hacia arriba».

De pretender un cambio, éste es el momento, ya que el PSPV tiene cada vez menos ocasiones para «colocar» gente.

En los próximos meses, el partido va a afrontar unas elecciones, las Europeas, que servirán para recolocar personas.

Si Torres sube a la Mesa, la portavocía la podría ejercer el ya mencionado Rafael Rubio, brillante parlamentario, o la no tanto, pero presidenta del grupo, Ana Barceló.

De Bruselas llegarán en esta nueva mudanza los diputados Andrés Perelló y Josefa Andrés, a los que habrá que buscarles -o no- destino.

Perelló es uno de los nombres que suenan para cubrir la vacante de Emilia Caballero como adjunta en la Sindicatura de Greuges.

Los socialistas han de elegir también al relevo de Carles Santos, en el Consell Valencià de Cultura; y de Joan Ignasi Pla, en el Consell Jurídic Consultiu.

A todo esto, en dichas decisiones se deberá quizá ponderar el equilibrio de fuerzas entre las familias que concurrirán a las primarias de marzo, lo que habitualmente se ha denominado «pasteleo», si bien un resultado contundente a favor de uno u otro candidato, pueden dejar al contrario sin ninguna posibilidad.

De momento, las decisiones no están tomadas, aunque consta que algunos «candidatos» ya han iniciado sus movimientos para posicionarse.