El presidente del Banco Sabadell insta a que se forme un Gobierno, aunque no sea estable

La entidad celebra hoy su segunda Junta de Accionistas en Alicante tras salir de Cataluña

«Nos gustaría que hubiera un Gobierno estable o, al menos, aunque no fuera estable que hubiera un Gobierno». Son las palabras que pronunció ayer el presidente del Banco Sabadell, Josep Oliu, en Alicante, donde hoy se celebra la segunda Junta de Accionistas en la Comunitat Valenciana desde que el banco saliera de Cataluña a finales de 2017 escapando del movimiento soberanista.

Al ser preguntado por el resultado que espera tras las próximas elecciones generales del 28 de abril, el presidente de la entidad financiera indicó que sea el que sea el Gobierno resultante, deberá hacer frente a dos problemas principales: el paro, que sigue estando en una tasa del 14 por ciento, y la deuda pública.

«Las empresas han hecho un gran esfuerzo de desapalancamiento, pero el sector público no estaría en la misma situación de comodidad si empezara otra crisis. Si el país se enfrentara ahora a una fase negativa del ciclo, el sector público estaría en una situación complicada».

En cuanto a la situación económica en España, Oliu aseguró que el país se encuentra en una fase de desaceleración que se prevé que dure este año y el siguiente. Aunque aseguró que el panorama no es como el de 2006 y 2007, cuando se produjo una «burbuja», «lo único» que puede ser un problema es la desaceleración de la demanda externa por factores de riesgo externo.

Respecto a una posible ampliación de capital de la entidad ante los bajos índices de rentabilidad que presenta el banco este año, Oliu descartó que se realice ninguna operación de este tipo y confió en llegar al 12 por ciento de rentabilidad este ejercicio.

Por su parte, el consejero delegado del banco, Jaime Guardiola, indicó con respecto al futuro de la entidad que «la reducción de oficinas es algo dinámico, la tendencia natural es que haya reducción de oficinas y se irá acelerando en tanto en cuanto los clientes prefieran relacionarse con el banco a través de herramientas digitales». Cada año, dijo, la entidad proyecta unos números, que para este ejercicio se sitúan cerca de las 100 oficinas en todo el país, «pero no son decisiones cien por cien cerradas».

En cuanto al sector bancario en Europa, Oliu se mostró especialmente preocupado por la situación del «brexit» en Reino Unido, y aseguró que en España hay otro factor, que es el de la limpieza de los balances tras la crisis. «Aunque ya haya acabado, los inversionistas no saben cuáles van a ser los requerimientos futuros».

El TSB podría venderse

Por lo que respecta al futuro del banco TSB, la filial británica del Banco Sabadell, Oliu explicó que durante 2018 no presentó los resultados esperados, aunque se mostró confiado en que a partir del año que viene aporte a la entidad y no reste.

«Lo que está debajo de la mesa»

«Lo que está debajo de la mesa se puede poner encima en otro momento». Fue la respuesta nada esclarecedora del presidente del Banco Sabadell, Josep Oliu, al ser preguntado por una posible fusión con Bankia, si bien aseguró que en este momento no se está abordando dicha cuestión. El presidente de Bankia, José Ignacio Goirigolzarri, descartó posibles fusiones la semana pasada.