Podemos avisa a Durán: no tolerará «barreras a la comunicación»

Hay formalidades que para algunos son más evanescentes o menos férreas que para otros. La Mesa del Parlamento andaluz, el órgano de dirección de la institución, ha acordado prohibir el uso de los espacios atribuidos a los partidos con representación en ella, PSOE-A, PP-A, Podemos, Ciudadanos (C’s) e IULV-CA, para cuestiones ajenas a las propias de la actividad parlamentaria.

Hay formalidades que para algunos son más evanescentes o menos férreas que para otros. La Mesa del Parlamento andaluz, el órgano de dirección de la institución, ha acordado prohibir el uso de los espacios atribuidos a los partidos con representación en ella, PSOE-A, PP-A, Podemos, Ciudadanos (C’s) e IULV-CA, para cuestiones ajenas a las propias de la actividad parlamentaria. En caso de que esta utilización inadecuada se produjera, el presidente de la Cámara autonómica, el socialista Juan Pablo Durán, podrá, de acuerdo o no con la Mesa y previa advertencia a los responsables, adoptar cuantas medidas estime oportunas, incluido el desalojo.

La Mesa concreta en su texto, según detalló ayer Europa Press, que el apartado primero del artículo 25 del Reglamento del Parlamento establece que éste «pondrá a disposición de los Grupos Parlamentarios locales y medios materiales suficientes y les asignará, con cargo a su presupuesto, las subvenciones necesarias para cubrir sus gastos de funcionamiento» por lo que, el uso de esos elementos para fines ajenos a la acción consustancial a la institución «supondría conculcar y vulnerar lo establecido en el Reglamento», según la Mesa, para la que en los últimos meses, «se han realizado actividades» que de forma efectiva «transgreden este principio».

De hecho, el mencionado acuerdo de ese órgano interno llega después de que desde Presidencia se criticara hace unos días que Podemos celebrara el pasado 4 de noviembre un debate que fue retransmitido por internet en las instalaciones de su Grupo Parlamentario entre las tres candidatas que intentaban hacerse con la Secretaría General del partido: la finalmente ganadora Teresa Rodríguez, Esperanza Gómez y Carmen Lizárraga. Las tres son diputadas andaluzas. «Para los intereses particulares están las sedes de los partidos», afearon entonces desde la Presidencia, para poner el acento además en el hecho de que ningún representante del partido comunicara a la Cámara que iba a tener lugar allí la confrontación entre las tres aspirantes a liderar Podemos Andalucía.

Sin embargo, la formación morada entiende que no ha hecho nunca un «uso incorrecto o inapropiado de las instalaciones que forman parte» de lo asignado a su Grupo. Fuentes del partido aseguraron ayer a LA RAZÓN no entender «la postura de Durán», como no lo hacían «cuando quería vetar que colectivos ciudadanos pudieran comparecer en la sala de prensa del Parlamento, que la gente de la calle tomara la palabra», recuerdan, pese a que sí se han hecho en ella ruedas de prensa de líderes ajenos a la Cámara como el de Ciudadanos, Albert Rivera. «No vamos a permitir que pongan barreras a la comunicación», advierten, para reprochar a Durán que «se comporte más como el secretario general del PSOE de Córdoba, que todavía es, que como el presidente de todos los Grupos del Parlamento». Lo cierto es que la línea entre lo que es puramente parlamentario y lo que no lo es puede ser difusa y volver a plantear desencuentros en el futuro.