El Ministerio de Defensa ruso asegura haber tomado cuatro barrios de la ciudad de Bajmut, el enclave más disputado en el este de Ucrania. Kiev, por su parte, ha desmentido esta versión y garantiza que las posiciones de estos últimos días no han cambiado. El Ejército ucranio mantiene bajo su control la denominada “carretera de la vida”, la vía de 17 kilómetros de distancia que conecta el enclave con la ciudad de Chasiv Yar, que se ha convertido en la ruta principal para nutrir de suministros a las fuerzas ucranianas.

El portavoz del Ministerio de Defensa ruso, Ígor Konashénkov, declaró que, además de la toma de estas cuatro áreas residenciales, las Fuerzas Aerotransportadas habían conseguido “inmovilizar” el despliegue ucraniano a las afueras de la ciudad. En las últimas 24 horas se habrían producido, según la versión del Kremlin, hasta cuatro incursiones rusas en la ciudad con el respaldo de la artillería.

El fundador del Grupo Wagner, Yevgeny Prigozhin, que amenazó con retirar a sus mercenarios en caso de no recibir municiones por parte del Ministerio que encabeza Serguéi Shoigú, con quien mantiene desde hace meses una agria disputa por tomar la iniciativa en la invasión, también anunció que los combatientes de Wagner habían avanzado entre 100 y 150 metros en Bajmut, arrinconando aún más a las tropas ucranianas.

Pero el portavoz del Grupo Oriental de las Fuerzas Armadas de Ucrania, Serhiy Cherevaty, ha asegurado que “a pesar de los fuertes combates, todavía no ha cundido el pánico” entre sus hombres. “La situación está totalmente controlada por el Estado Mayor y estamos viendo con tiempo todas las intenciones del enemigo”, añadió en declaraciones recogidas por el portal de noticias ucraniano ZN.

“Gracias a las fuerzas militares, los rusos todavía no han conseguido cortar nuestra logística”, apuntó Cherevaty. En este sentido, Kiev insiste en que “la carretera de la vida” sigue operativa, un factor determinante que permite a sus tropas mantener posiciones en un enclave prácticamente reducido a cenizas. El alto mando militar ucraniano es consciente de los peligros de perder el control de Bajmut, más aún en la antesala de una gran contraofensiva.

El alto mando militar de Ucrania recogió en su actualización diaria del domingo que sus fuerzas habían repelido en las últimas 24 horas casi 60 ataques rusos a lo largo de la línea del frente del Donbás, que se extiende precisamente desde Bajmut hasta Marinka, hacia el sur, pasando por Avdiivka.

El Ejército ruso lleva 10 meses intentando abrirse camino entre las cenizas de Bajmut, un enclave considerado por la cúpula militar rusa como un trampolín para atacar otras ciudades. Pero Kiev se ha implicado de lleno en la defensa de lo que era un municipio de casi 70.000 habitantes antes del inicio de los combates.

Chasiv Yar podría convertirse en el próximo objetivo de las fuerzas invasoras en caso de que Bajmut caiga. Sin embargo, señalan los analistas, la próxima ciudad con la que está conectada por “la carretera de la vida” se encuentra en un terreno más elevado y se cree que las fuerzas ucranianas han construido fortificaciones defensivas en sus inmediaciones.