Preocupación por el príncipe Guillermo tras su reaparición con gesto extraño y problemas de equilibrio

El príncipe Guillermo de Gales ha generado preocupación entre la opinión pública en su primera aparición pública tras los duros momentos que en el terreno de salud están atravesando dos de las personas más cercanas en su vida, su padre, el rey Carlos III, y su mujer, Kate Middleton.

Del primero se ha sabido que sufre cáncer, aunque no está confirmado de qué clase, y de ella pocos detalles se conocen sobre qué achaques enfrenta, después de estar ingresada a consecuencia de la intervención a la que se sometió en el mes de enero.

Además, su hermano Harry, con el que mantiene una relación de distancia, volase desde Los Ángeles a su país natal para visitar a su padre enfermo. El heredero al trono de Reino Unido no coincidió con él ya que, explicó, tenía "cosas muchas importantes que hacer", como reanudar su agenda de compromisos institucionales.

El primer acto en el Castillo de Windsor de su vuelta a la escena oficial, en el que estuvo representando al monarca apartado de sus obligaciones por motivos médicos, ha sido para investir a medio centenar de personas con condecoraciones.

En las imágenes del evento se ha visto claramente a un Príncipe de Gales más delgado, con un gesto extraño en el rostro, profundas ojeras, llevándose en sucesivas ocasiones una de sus manos al vientre, parpadeando continuamente e, incluso, balanceándose cuando se mantenía firme en pie. Todo ello, concretamente, ha ocurrido en la noche del pasado lunes durante una gala benéfica de la organización de ambulancias aéreas de Londres.