El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, llamó este miércoles a sus ciudadanos al orden y rechazó cualquier "disturbio" en Israel o en Cisjordania ocupada, tras una violenta jornada que dejó 20 heridos en el norte del país por protestas y un palestino muerto tras ataques de colonos judíos.

"Hay días en los que debemos afirmar lo que es evidente: el Estado de Israel es una nación de leyes. Todos los ciudadanos de Israel están obligados a obedecer la ley. No permitiremos disturbios", ni en los Altos del Golán ni en Cisjordania, dijo Netanyahu en un comunicado.

"Doy todo mi apoyo a la Policía de Israel y a las fuerzas de seguridad en sus esfuerzos por mantener la ley y el orden. No aceptaremos ninguna provocación a la Policía o a las fuerzas de seguridad en estos lugares ni en ningún otro lugar", subrayó.

Doce policías y ocho civiles resultaron heridos este miércoles durante enfrentamientos en los Altos del Golán, en el norte de Israel, que estallaron cuando miles de drusos se manifestaban contra la construcción de un parque eólico cerca de la ciudad de Majdal Shams.

Se trata del segundo día consecutivo en el que miles de residentes drusos salieron a protestar, con piedras y cócteles molotov, contra lo que consideran una amenaza a su estilo de vida agrícola y una invasión de tierras ancestrales.

Según informes de la Policía difundidos en medios israelíes, doce policías fueron heridos y ocho manifestantes resultaron con lesiones, cuatro de ellos graves, uno de los cuales por arma de fuego.

El comisionado de la Policía de Israel, Yaakov Shabtai, rechazó "la violencia contra los Policías y contra los símbolos del Gobierno".

Por otro lado, varios poblados palestinos de Cisjordania ocupada han vivido desde la noche del martes violentos ataques por parte de colonos israelíes.

Un palestino murió este miércoles y doce resultaron heridos -uno de ellos de gravedad- en el pueblo palestino de Turmusaya, en el centro de Cisjordania, donde cientos de colonos acudieron en masa para quemar decenas de casas y automóviles, después de una agresión semejante anoche en la ciudad de Huwara.

"Eventos de este tipo impiden que las fuerzas de seguridad se concentren en su misión principal: proteger la seguridad de los ciudadanos del Estado de Israel y prevenir el terrorismo", dijo el Ejército en un comunicado.