Una manifestación a favor de Palestina celebrada en Francia se ha convertido en objeto de controversia después de que las autoridades dispersaran a los manifestantes utilizando granadas de gas lacrimógeno.

El propósito de la manifestación era mostrar solidaridad con el pueblo palestino en medio de la creciente tensión en la región. Las impactantes imágenes de la policía francesa empleando gas lacrimógeno para disolver a los manifestantes se han difundido ampliamente a través de las redes sociales, generando un intenso debate público.

Recientemente, se ha anunciado que Francia ha prohibido las manifestaciones en apoyo al pueblo palestino. Las autoridades alegan que, a la luz de episodios previos de violencia en manifestaciones similares, era necesario intervenir para garantizar la seguridad pública. El Ministro del Interior, Gérald Darmanin, expresó en un comunicado dirigido a los prefectos regionales que estas manifestaciones "probablemente generen alteraciones del orden público".

La determinación se produjo después de que el tribunal administrativo de París respaldara la prohibición emitida por la prefectura de la capital en relación con una manifestación pro palestina que estaba programada para hoy por la tarde en la Plaza de la República.

El Ministro del Interior de Francia, Gérald Darmanin, es quien ha ordenado esta medida, invocando la necesidad de mantener el orden público en el país. La decisión del tribunal resalta la importancia de conciliar el respeto a la libertad de expresión con la preservación del orden público, sosteniendo que bajo ciertas circunstancias y la decisión del juez, la administración puede prohibir una manifestación.

El tribunal ha señalado la existencia de un ambiente de "violencia extrema" en todo el territorio nacional, subrayando particularmente el "resurgimiento de actos antisemitas" desde que el Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás) lanzó una ofensiva contra Israel el pasado sábado.

El conflicto entre Israel y Palestina ha sido una cuestión que ha suscitado manifestaciones en todo el mundo. Mientras que algunas naciones han expresado su apoyo a Israel, otras han mostrado solidaridad con el pueblo palestino, lo que ha llevado a manifestaciones y protestas en diversas partes del mundo, incluida Francia.