El Estado Islámico causa 30 muertos en una reunión de periodistas chiitas en Afganistán

El Estado Islámico se ha atribuido la autoría de una matanza de periodistas afganos, de religión chiita, en la ciudad de Balj, en la provincia de Mazār-e Šarīf. “30 chiítas y periodistas hostiles al Estado Islámico resultaron muertos y heridos en un nuevo bombardeo que golpeó un centro chiita en la provincia de Balkh de la misma ciudad”, asegura la agencia Amaq, controlada por los terroristas.

“La explosión fue causada por una bolsa trampa que los combatientes del Estado Islámico pudieron plantar y detonar dentro del centro chiíta afiliado a Irán "Al-Tibyan". El bombardeo tuvo como objetivo una fiesta que se organizó dentro del centro chiita para honrar a varios periodistas que trabajaban en diferentes agencias de medios que estaban involucrados en la guerra y la incitación contra el Estado Islámico”.

“La explosión se saldó con la muerte y lesiones de unos 30 periodistas y chiitas que organizaban la fiesta, así como miembros de la milicia talibán que custodiaban el lugar, que resultó gravemente dañado por la explosión”. Recuerdan que el atentado se produce dos días después del ataque que costó la vida al gobernador de dicha provincia “lo que confirma la capacidad del Estado Islámico para repetir sus acciones pese a los esfuerzos de la milicia talibán para evitarlo”.