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Desmemoria

Pedro Castillo alega que bebió una sustancia antes y “no recuerda” su discurso a la nación

Las protestas incendian Perú mientras la nueva presidenta intenta busca la gobernabilidad y un Gabinete conformado por varias fuerzas políticas

La idea de la nueva presidenta de Perú, Dina Boluarte, quien ascendió al cargo tras la vacancia de Pedro Castillo ordenada por el Congreso en medio del intento de autogolpe que protagonizó el ahora exmandatario, de completar el periodo presidencial hasta 2026 puede hacer aguas rápidamente. Desde la noche del jueves ocurren manifestaciones populares en distintas regiones del país incluyendo la capital Lima exigiendo elecciones adelantadas. Entre quienes tomaron las calles para protestar, también hay quienes exigen la liberación de Pedro Castillo y hasta la disolución del Congreso.

El Poder Judicial determinó una detención preliminar contra el expresidente por siete días por los presuntos delitos de rebelión y conspiración, y con peligro de fuga. Las acusaciones en su contra pudieran desembocar en una condena de entre 10 hasta 20 años de cárcel por su intento de disolver el Congreso para gobernar por decreto en un gobierno de “emergencia excepcional”, convocar a una constituyente y decretar un toque de queda.

Las posiciones son divididas en Perú, pero la mayoría coincide en la convocatoria de elecciones generales adelantadas que renueve también al poder legislativo. Varios grupos han dicho desconocer la presidencia de Dina Boluarte. En Lima hubo confrontación con la Policía Nacional que incluyó represión con gases lacrimógenos.

Las manifestaciones fueron más intensas en la carretera Panamericana Sur, Ica, Arequipa, Tacna, entre otras regiones. El servicio de transporte público se vio afectado por el cierre de las vías, con la Superintendencia de Transportes del gobierno nacional recomendando reprogramar las salidas de autobuses hacia el sur del país, y a los conductores de vehículos particulares “postergar sus viajes”. Las empresas de transporte anunciaron que suspendían sus operaciones interprovinciales para resguardar a pasajeros, aunque algunas continuaron vendiendo boletos dejando en manos de los pasajeros la decisión de asumir el riesgo.

El Ministerio de Transportes y Comunicaciones (MTC) compartió un mapa interactivo en donde se pueden ver las vías bloqueadas en tiempo real. Durante la jornada del viernes, las líneas rojas que denotaban bloqueos de tráfico inundaron buena parte del territorio.

Entretanto, Dina Boluarte reconsidera sus posiciones. Vistas las protestas a escala nacional, la mandataria señaló este viernes que “cuando se juró el cargo hace dos días, se hizo hasta el 2026; sin embargo, si la sociedad y si la situación lo amerita, adelantamos las elecciones”, precisó a la prensa antes de encabezar actos oficiales por el Día del Ejército Peruano y aniversario de la Batalla de Ayacucho. Allí estuvo acompañada por la presidenta del Poder Judicial, Elvia Barrios, y el titular de la Mesa Directiva del Congreso, José Williams, además del Alto Mando Militar.

También respondió a las manifestaciones pidiendo calma a la población. “Quiero llamar a los hermanos y hermanas peruanos que están saliendo en las protestas: hay que calmarnos. Dina Boluarte está asumiendo esta responsabilidad dentro de esta crisis política, pero no soy yo quien ha provocado tal situación; yo solo estoy cumpliendo el rol constitucional”, declaró.

Entretanto continúan las conversaciones con distintos grupos políticos representados en el Congreso, una institución con una evaluación negativa de 80% desde hace un lustro. En reuniones que ha sostenido la presidenta con las bancadas de Avanza País, Cambio Democrático, Somos Perú y Fuerza Popular ha señalado que no quiere incluir congresistas en su gabinete –que comenzará a juramentar este sábado 10 de diciembre- y que aspira construir un gobierno “de ancha base” que represente a las distintas fuerzas políticas del país.

Pero el partido del depuesto Pedro Castillo, Perú Libre, no quiso atender invitación alguna ni conformar gabinete conjunto “por considerar que la extrema derecha ha consumado un golpe de Estado en el país. El partido se une a las luchas populares”, escribió Vladimir Cerrón, el jefe del grupo, en Twitter.

Castillo “no recuerda” su autogolpe

Pedro Castillo sigue detenido en la cárcel de Barbadillo mientras su defensa avanza en su trabajo ante la acusación por conspiración y rebelión. Este viernes, el abogado del expresidente, Guillermo Olivera, afirmó que su representando tomó una bebida antes de emitir su discurso en el que ordenaba disolver el Congreso, y que no recordaba haber pronunciado las palabras que fueron emitidas en televisión nacional.

En unas breves declaraciones a los medios, Olivera sostuvo que Pedro Castillo había perdido el control sobre sí mismo al ingerir la sustancia.

Más tarde, el congresista Guido Bellido, del grupo que apoya a Castillo puertas adentro del legislativo, se reunió con el exmandatario en su presidio y a la salida aseguró a la prensa que el detenido no recuerda haber leído el mensaje a la nación con el que intentó dar un golpe de Estado.

“Yo le he consultado al presidente de por qué ha leído ese mensaje, el presidente no recuerda lo que ha leído. Yo le he tratado de consultar y él me dice: ‘No recuerdo, Guido’. No sabemos quién ha conspirado, pero el presidente no recuerda. La investigación va a tener que aclarar. El presidente no recuerda, me lo ha dicho con sus propias palabras”, dijo.

En ese sentido, Bellido Ugarte consideró que Pedro Castillo no redactó su último mensaje a la nación, por lo que aseveró que “hay que determinar quién lo ha escrito”. Y reiteró lo dicho antes por el abogado Olivera: “Cuando leyó el mensaje, unos minutos antes, le dieron una bebida y después se sintió atontado. Por eso leyó… Todos vieron que leyó de forma temblorosa y mi hipótesis es que estaba sedado”, comentó.

Tras visitar al exjefe de Estado, Bellido Ugarte aseveró que los cargos contra Castillo no se sostienen pues “solo ha hecho una lectura que no se ha materializado” y “no se ha dado la rebelión ni sedición”.