EEUU

Las imágenes de un policía cargando contra haitianos que la Casa Blanca tilda de “horrible”

Guardias fronterizos usan látigos y caballos para expulsar a los migrantes que llegan a Texas

Agentes fronterizos cargan contra migrantes haitianos en la frontera con Texas
Agentes fronterizos cargan contra migrantes haitianos en la frontera con TexasFelix MarquezAgencia AP

La Casa Blanca se ha visto obligada a intervenir para frenar la polémica por la publicación de fotografías en las que se ve a agentes fronterizos de Estados Unidos cargando y amenazando a migrantes haitianos con una correa parecida a un látigo cerca de un campamento junto a un río en Texas.

El incidente se produjo cuando decenas migrantes haitianos estaban cruzando de un lado a otro entre Ciudad Acuña, en México, y el campamento al otro lado de la frontera con EEUU, en la localidad de Del Río con el propósito de comprar comida y agua que no pueden encontrar en territorio estadounidense. La agencia Reuters cita testigos que vieron a agentes montados a caballo bloqueando el camino de los migrantes y a uno de los oficiales supuestamente golpeando con una correa a un migrante.

Migrantes haitianos cruzan el río para acudir a México a comprar comida desde el lado de EEUU
Migrantes haitianos cruzan el río para acudir a México a comprar comida desde el lado de EEUUEric GayAgencia AP

“No creo que nadie que vea esas imágenes pensaría que es aceptable o apropiado”, dijo a la prensa la portavoz de la Casa Blanca, Jen Psaki. Algunos en las redes sociales comentaron que la imagen de hombres negros huyendo perseguidos por agentes de policía a caballo recordaban escenas históricas de persecución sufridas por los negros en Estados Unidos.

La policía fronteriza de Estados Unidos suele utilizar el caballo para desplazarse debido a las dificultades de la orografía, lo que se cuestiona en este caso es la utilización de un posible látigo para amenazar y golpear a un inmigrante haitiano.

Este campamento está en el centro de la polémica ya que en él se encuentran de forma temporal más de 12.000 migrantes, en su mayoría haitianos, que quieren pedir asilo político en Estados Unidos huyendo de la violencia y la pobreza extrema de sus países de origen. El campamento se halla debajo de un puente que cruza el Río Grande y desde allí la administración de Joe Biden está organizando vuelos de deportación para devolver a los migrantes a sus países.

Los primeros vuelos que transportaban migrantes aterrizaron en Puerto Príncipe el domingo desde el campamento de Del Rio. El lunes, el secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, habló con el primer ministro haitiano, Ariel Henry, sobre la repatriación de migrantes haitianos. “No pueden enviarnos de regreso a Haití porque todo el mundo sabe cómo es Haití en este momento”, dijo el migrante haitiano Wildly Jeanmary. “El gobierno de Estados Unidos no tiene conciencia”, añadió Nerlin Clerge, otro migrante haitiano que se encontraba cerca de la orilla del río. “Este trato que están dando a los migrantes es racismo, por el color de nuestra piel”, dijo Maxon Prudhomme, un haitiano a orillas del Río Grande en México.

Por su parte, el gobernador de Texas, Greg Abbott, ha solicitado al presidente Biden la declaración de emergencia para el estado ante la crisis migratoria. En su misiva, Abbott ha puesto de manifiesto la complicada situación que se vive en la zona, así como la incapacidad del Gobierno federal para hacer cumplir las leyes de inmigración y detener a aquellas personas que cruzan de forma ilegal la frontera.