Navarra
Fandiño dos orejas en Bayona con buenos Fuente Ymbro
El diestro de Orduña Iván Fandiño salió ayer a hombros en el primer festejo de la Feria de Agosto en Bayona, tras pasear una oreja en cada toro de un buen lote de la ganadería gaditana de Fuente Ymbro. Mientras, en La Coruña, El Cordobés, que reapareció tras su cornada en La Línea (Cádiz), El Fandi y Esaú Fernández se repartían siete orejas en una tarde triunfal.
Además, el torero de Salteras Manuel Jesús «El Cid» ratificó su buen momento cortando dos apéndices de los nobles astados de Manolo González en El Puerto de Santa María. Por otro lado, en Pontevedra, tanto Juan José Padilla como Sebastián Castella salieron por la puerta grande en el segundo festejo de la Peregrina
En El Puerto de Santa María (Cádiz), se lidiaron toros de Manolo González, nobles. El Cid, oreja en ambos; César Jiménez, palmas y silencio; y David Mora, silencio y oreja. Casi un cuarto de entrada.
En La Coruña, con toros de García Jiménez, manejables. El Cordobés, oreja en ambos; El Fandi, oreja y dos orejas; y Esaú Fernández, oreja en ambos. Tres cuartos de entrada.
En Pontevedra, toros de Alcurrucén, de buen juego. Padilla oreja en ambos; Castella, oreja y dos orejas; y Perera, silencio en su lote. Casi lleno.
En Alicante, se corrieron toros de Ribera de Campo Cerrado, de juego desigual. Javier Castaño, ovación y oreja; Francisco José Palazón, oreja y silencio; y Joselillo, oreja y palmas. Un cuarto de entrada.
En Bayona (Francia), toros de Fuente Ymbro, nobles y de buen juego. Destacó el 5º. Antonio Ferrera, silencio en ambos; Iván Fandiño, oreja y oreja tras aviso; y Thomas Duffau, ovación tras aviso y oreja. Más de media entrada.
En Estella (Navarra), toros de Victorino Martín, de interesante juego. Luis Bolívar, silencio y oreja; Eduardo Gallo, silencio y oreja; y Agustín de Espartinas, silencio y oreja. Tres cuartos de entrada.
En Íscar (Valladolid), toros para rejones de Luis Terrón, mansos y descastados. Hermoso de Mendoza, oreja y dos orejas; Diego Ventura, silencio y dos orejas; y Antonio D´Almeida, silencio y oreja. Media entrada.