Tura reta a Navarro a unas primarias para elegir al candidato del PSC

BARCELONA – Montserrat Tura desafío ayer al primer secretario del PSC, Pere Navarro, a convocar unas elecciones primarias para elegir al candidato socialista a la Presidencia de la Generalitat. Aunque desde Nicaragua, el cuartel de los socialistas catalanes, admiten que como mínimo se necesitan cuatro meses para tirar adelante el proceso, Tura insistió en que dos meses bastan.

La ex consellera, que ya ha vivido unas primarias –disputó la candidatura al ex alcalde de Barcelona, Jordi Hereu, y acabó perdiendo–, es la primera candidata que confirma que se presentará a unas presuntas primarias. Tura se encargó de recordar que la convocatoria de una consulta para elegir al candidato de los socialistas catalanes era «una esperanza prometida en el último congreso del PSC», pero en menos de cuatro horas, Navarro truncó sus planes.

Pendientes de Mas
El primer secretario del PSC replicó a Tura que «tendremos que ver si el calendario lo permite –convocar unas primarias–, tras constatar que «cuando se anuncien las elecciones ya diremos cuál es el proceso a seguir». De todos modos, advirtió de que la convocatoria de unas elecciones primarias no es una minucia. Un proceso como éste, nuevo en España, «no se improvisa en tres días, es una cosa muy seria». Para empezar, los socialistas aún no tienen un reglamento definido para regir este proceso.

Navarro recordó a la ex consellera que los socialistas franceses necesitaron más de un año para elegir a su candidato a la Presidencia de la República. Lo mismo piensa el alcalde de Lleida, Àngel Ros, cuyo nombre había sonado como uno de los candidatos a representar al PSC en la carrera a la Presidencia de la Generalitat.

Ros admitió que «no tiene sentido convocar esta consulta si Artur Mas adelanta las elecciones a noviembre o diciembre –las fechas que suenan más son el 25 de noviembre y el 2 de diciembre–». Para el alcalde de Lleida, «unas primarias limitadas a los militantes del partido no tendrían sentido». La idea que se barajó en el congreso del PSC es que las primarias fueran abiertas a la ciudadanía. Bastaba con pagar un euro y firmar un papel conforme se apoyan unos valores progresistas para participar.