No está dispuesta a que cuestionen su solidaridad. Ana Obregón presenta en diciembre un calendario con famosos, encabezado por Iván Sánchez, para afectados por el síndrome de Down: «He pasado meses comprometiendo a mucha gente y, para mi sorpresa, algunos me preguntaban si la colaboración era pagada: ‘‘Es benéfica'', tuve que recalcarles», declaró, entristecida por la versión que hemos dado de su deserción la noche de Mensajeros de la Paz. Por cierto, lo más disputado en la rifa fue una raqueta de Nadal: «Yo misma se la pedí y no le costó mandarla, es un amor. Me fastidia que distorsionen mi incomparecencia. La misma mañana, durante la misa, se lo advertí al Padre Ángel. Lo entendió. Tenía unas anginas insoportables», afirmó Ana, y le contesté: «Fue lo que a todos nos contaron, pendientes e intranquilos al ver que no llegabas».
Entonces, entre suspiros, me mostró un mensaje que le había enviado el Padre Ángel: «Querida Ana, aunque estoy fuera de España, me han comentado lo que ha salido en la Prensa. Sólo quiero que desde Haití sepas que te agradezco todo lo que haces por los demás de forma callada y discreta. Me consta el cariño que tienes a Mensajeros de la Paz. En esta familia te queremos». Y para que quede claro, añadió: «Hago mucho sin que nadie lo sepa».
Más aparente es lo de Tamara Falcó, en quien muchos quieren ver un recambio para la eterna Preysler. Es inagotable como la baronesa Thyssen, que la última semana celebró, hasta el alba en el Ritz, el XX aniversario del Museo Thyssen. Repitió su dolor ante el desapego de Borja, padre ya de tres hijos. Pero Enzo no viene con reconciliación bajo el brazo, más bien lo contrario: «Que no se olvide de que durante los últimos veranos casi lo perseguí en Ibiza y no tuve resultado alguno. Incluso accedí a comer con Chelo García Cortés, de quien me dicen que se ha distanciado, igual que de Belén Quijano, su hasta ahora ‘‘relaciones públicas''», me explicó, y yo le respondí: «Dice que colabora con la pareja de forma esporádica». La baronesa agasajó a los Reyes durante el aniversario. También estuvieron desde Ana Botella hasta Carmen Calvo, Juan Palacios, que acaba de renovar su contrato con Fernando Alonso para anunciar relojes, y la Infanta Pilar, entre otros.
Tita aspira a que su obra magna no sea museística sino familiar: quiere recuperar a Borja y la descendencia. Por ella no quedará.